Por: Raquel Carreón Lugo
El Campeonato Regional de Motocross dejó grandes emociones, no todos los fines de semana los duranguenses pueden ver un espectáculo de gran calidad.
La pista Campestre Track fue testigo durante dos días de los mejores pilotos nacionales, ya que se trataba de la semifinal y que mejor escenario que teniendo de fondo el cielo de Durango.
En un ambiente plenamente familiar, desde niños, mascotas, familias enteras, grupos de amigos, así como parejas de novios se pudieron observar en las carpas que ellos mismos instalaron, y es que nadie se quería perder el más mínimo detalle, es por eso que desde muy temprano se instalaron para tener el mejor lugar.
La categoría de los niños estuvo llena de adrenalina, los pequeños demostraron que saben hacer grandes suertes y que ellos dominan la motocicleta.
Las mujeres no se quedaron atrás y dejaron con la boca abierta a más de uno con esos vuelos espectaculares.
Los hombres en sus distintas categorías, dieron cátedra de todo lo que es el entrenamiento y la constancia, la adrenalina la contagiaron a todos los asistentes.
Al final todos terminaron con un buen sabor de boca, un accidente que tuvo que suspender las actividades, pero que al final no pasó a mayores.