-El conjunto de natación es para personas con discapacidad
Por: Raquel Carreón Lugo
Son de los grandes, nadie los detiene y no hay nada de impedimento para ellos, sino todo lo contrario, tienen sus metas bien puestas y sus discapacidades las ven como la más importante oportunidad de demostrar que pueden llegar a ser más grandes que cualquier otra persona.
Bajo el cargo de las maestras Norma Alicia Orona Reyes y Ruth Cecilia Barraza Castañeda, el equipo de Megalodón Durango entró en funciones, un conjunto de natación para niños con discapacidad en marzo de este año.
Todos son una gran familia, las maestras tienen grandes conocimientos y eso aunado con el amor que imparten a todos sus alumnos, es por eso que cada uno de los integrantes las ven como una segundas madres, les encanta ir a la alberca y convivir, además de tener ese espíritu competitivo que la vida les ha exigido.
Génesis Villegas
Génesis Guadalupe Villegas Rodríguez cuenta con 15 años, desde los diez está inmiscuida en el mundo de la natación, quiere estudiar psicología y manda un mensaje a todos que nunca se pongan límites que todo se puede lograr. La discapacidad de Génesis es neuromotora, es decir falta de movilidad en sus extremidades laterales izquierdas.
Diego García
Diego Emiliano García Rodríguez tiene 16 años de edad, acudió a natación como terapia hasta octubre del año en curso, pero fue tanto su gusto que decidió integrarse al equipo y sus cualidades son muy grandes, ya que estuvo en la Paralimpiada Nacional en cuatro pruebas, 50 metros dorso, pecho, libre y 100 metros dorso, su actuación fue casi impecable, que se colgó dos medallas de oro y dos de plata.
Para Emiliano la natación es una forma de vida, le gustaría representar a Durango en una Olimpiada Internacional, sin descuidar sus estudios, su discapacidad motriz de sus miembros inferiores.
Carlos Daniel Treviño
Carlos Daniel Treviño Nájera, desde los cuatro practica la natación como terapia para desarrollo de motricidad en los cursos de verano, actualmente cuenta con 20 años de edad. Una de sus grandes metas es asistir a paralimpiadas para conseguir medallas, su discapacidad es daño orgánico cerebral con cicatrices de infartos cerebrales intrauterinos.
Israel Reyes
Israel Reyes Piña cuando tenía siete años de edad, empezó en las albercas en el Centro de Seguridad Social (CSS), estuvo durante tres años ahí en entrenamiento, posteriormente empezó a entrenar con las maestras Ruth y Norma desde marzo de este año. El diagnóstico de Israel es discapacidad de síndrome de Down, su meta es trabajar mucho para conseguir medallas en las competencias.
Thania Lizeth Velázquez
Thania Lizeth Velázquez Gonzales cuenta con 23 años de edad, cuando tenía 11 empezó en la natación en el Centro de Seguridad Pública, entrenó por siete meses pero no consiguió nadar, posteriormente fue a clases en una alberca privada en donde logró su objetivo, a la edad de 19 años retomó sus clases en la alberca ubicada en la colonia Chapultepec.
Un años más tarde de nuevo retoma sus clases en la alberca 450 con el profesor Víctor y desde marzo de este 2019 se une al grupo de natación en la alberca Olímpica del Parque Guadiana. Su diagnóstico médico es discapacidad intelectual, síndrome Down.
Emily Yaxin Quiñones Rivera
Emily Yaxin Quiñones Rivera estudia en el Centro de Integración Laboral (CIL), cuenta con 16 años de edad y cursa la preparatoria en el CAED, su discapacidad es intelectual. Sus actividades favoritas es pescar, andar en bicicleta, escuchar música, interactuar con sus mascotas y nadar.
Aprendió a nadar junto a su mamá en el Centro de Seguridad Social y actualmente está muy contenta de poder continuar nadando ahora en la alberca Olímpica, al lado de un gran equipo de compañeros y maestras.
Miguel Ángel López
Con 16 años, Miguel Ángel López Yáñez Blanco inició clases de natación a la edad de 18 meses en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de Gómez Palacio con el maestro Lalo del CREE de aquella zona.
En Durango a partir de los siete años de edad en Acuática Rosas y AcuaMar empezó a nadar, posteriormente clases personalizadas con la maestra Ruth Barraza en Acuatorre y alberca 450 durante un periodo de tres años.
En la Alberca Olímpica cuando se formó un equipo para niños con discapacidad en marzo del año en curso, Miguel Ángel decide unirse para trabajar en perfeccionar técnica, velocidad y resistencia.
El diagnóstico de Miguel Ángel es síndrome de down, pero eso no es impedimento para lo que quiere lograr, el conseguir muchas medallas en todas las competencias.