• México requiere mejorar su resiliencia ante la crisis climática 

El daño agropecuario por la severa sequía tiene efectos a nivel mundial, una de sus repercusiones más graves es el aumento en el precio de los alimentos, “México tiene que incrementar su resiliencia ante la crisis climática”, señaló el miembro del Consejo-Mexicano para el Desarrollo Sustentable (CMDRS), Juan Carlos Arizmendi.

Debido al cambio climático, en 2020 se registraron fuertes lluvias en África y Asia; mientras que una severa sequía afectó a América.

Países como Brasil y Argentina presentan complicaciones en su producción agrícola y han limitado sus exportaciones; mientras que Estados Unidos atraviesa por un retraso de siembras.

Los patrones climatológicos advierten de sequías excepcionales cada vez más recurrentes, como la sufrida en 2011 donde se perdió el 40 por ciento del inventario ganadero del país.

Incluso, el cambio climático amenaza la disponibilidad de agua para consumo humano.

Ante este escenario, Juan Carlos Arizmendi, analista del CMDRS, recomienda que México adopte políticas de adaptación para mejorar la resiliencia a un clima cambiante y cada vez más extremo.

Invertir en infraestructura hidráulica y esquemas financieros, para mitigar perturbaciones de mercado, apoyos que ayuden a recuperar y reactivar más rápido la productividad primaria; avanzar más rápido a una seguridad alimentaria que blinde la economía familiar.

• Se elabora un pronóstico regional para dar atención al problema

La sequía presenta un auténtico desafío, tema que ha sido abordado en el CMDRS con buena disposición de las autoridades; hay una agenda conjunta con SADER, Conagua e INIFAP; con la participación de la Asociación Mexicana de secretarios de Desarrollo Agropecuario (AMSDA).

Se elabora un pronóstico regional que permita tener la mejor aproximación para dar la atención de este problema. Se divide en dos etapas: ciclo agrícola Primavera Verano 2021 y ciclo Otoño-Invierno 2022; sin dejar de lado la severidad que afecta al sector ganadero.

Más información: Durango solicita declaratoria de emergencia por sequía

• Necesario activar recursos emergentes del gobierno en apoyo de los campesinos

En relación a la solicitud de declaratoria de emergencia que envió el gobernador, José Rosas Aispuro Torres, a la Secretaría de Gobernación; Juan Carlos Arizmendi recordó que anteriormente existían diversos mecanismos para establecer esta condición.

La declaratoria se evaluaba por el INIFAP y la Conagua, e incluso por instancias locales. «Hoy no se tiene claridad en los mecanismos de validación que estamos en emergencia».

Señaló que es necesario que se valore oportunamente esta solicitud del Gobierno del estado de Durango, ya que es importante su validación.

Ya que una vez emitida la declaratoria de emergencia se detonan diversos mecanismos con la finalidad de mitigar efectos, situando algunas previsiones presupuestales emergentes por encima del gasto ordinario; por ejemplo,  adelantar programas destinados al campo e incluso llegar a acciones con la banca de desarrollo para créditos y establecer cultivos alternos.

Además, restructurar carteras (deudas) por los efectos adversos que se están generando.

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