A pesar del semáforo epidemiológico naranja, los jóvenes mantienen alta movilidad y con ello los contagios de COVID-19. Por ello, se hace necesario adecuar las restricciones para poder hacer contenciones, sobre todo en el caso de bares; comentó el secretario el Ayuntamiento, Mario Garza Escobosa.
Detalló que ante esta situación, se valora modificar los horarios sobre todo, de los bares; porque al final la gente cuando ingirió sus alimentos, permanece en el sitio para consumir bebidas alcohólicas, como si fueran antros y eso genera movilidad.
“Hemos visto que el sector empresarial ha sido empático con el llamado de las autoridades y lo han atendido de manera responsable, pero sí necesitamos hacer ajustes”, sostuvo.
El funcionario municipal, reconoció que al cerrarse los antros, a partir de este fin de semana, se intensificaron las fiestas y reuniones de jóvenes en los domicilios, “esto es un problema porque hace algunos meses llegamos a registrar hasta 600 eventos, en un fin de semana”.
Los jóvenes hacen sus reuniones particulares, y por ello, como autoridad tendrán que actuar. Lo mismo se realizará con algunas fiestas que se hacen en las zonas rurales y que incluso parecen eventos masivos.
Cuando este tipo de eventos se detectan, se tendrá un acercamiento con las autoridades de los poblados y buscarán cómo inhibir ese tipo de comportamiento.
Finalmente, Garza Escobosa, resaltó que la brigada COVID-19 del municipio, tiene instrucciones precisas para buscar la manera de controlar los eventos sociales particulares, porque sí representan un problema.