Por: Antonio Gaytán
«Aumento de precios amenaza producción de pan. Traemos dos años complicados de aumentos y desabasto de insumos”, declaró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora y Similares de México (Canainpa) Durango, Fernando Flores.
Los miembros de la Canainpa en todo el país enfrentan un momento complejo a causa de la guerra en Ucrania.
Guerra que ha derivado en la escasez de trigo a nivel internacional y, en consecuencia, un fuerte incremento en su valor, al que se suma ahora el aceite comestible.
Fernando Flores, líder de este sector en Durango, reiteró que ha sido complicado mantener su producción porque se trabaja prácticamente con números cercanos a la quiebra.
Tanto Ucrania como Rusia son países productores de granos, harinas, aceites y grasas para el mundo entero y que, derivado de su conflicto, afectan la economía globalmente.
Los efectos adversos ya se reflejan de manera grave en la Ciudad de México, donde el costo de los panes va en aumento constantemente.
En el caso de Durango, las panificadoras están aguantando lo más posible, porque aumentar precios representaría una caída en sus ventas y más en esta temporada de calor.
“Veamos qué tanto más podemos aguantar, que por lo menos se detenga el efecto inflacionario que se complica día con día”, expresó.
La tasa inflacionaria anda por el 8 por ciento en el país de manera general, mientras que para la industria panificadora se enfrenta un aumento del 18 por ciento en sus materias primas.
De seguir subiendo el costo del trigo y el aceite, entre otros insumos, es un aumento de precios que amenaza la producción de pan, de agua y de dulce, en todas sus variedades.
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