Los familiares de la señora Saira Iveth Morales Leyva fueron víctimas de negligencia, por parte del personal médico del hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del municipio de Vicente Guerrero, Durango.

El día 23 de octubre la señora Morales acudió al hospital, porque comenzó a sentir contracciones y fue colocada en una camilla y bajo la supervisión de un médico que estaba entretenido con el celular.

El médico continuó conectado a internet a través del teléfono y la señora Morales tuvo que atender su parto de forma solitaria y alcanzó a sostener al bebé con sus propias piernas y brazos.

Una vez que el bebé nació fue revisado por la pediatra del IMSS y la mandó a una clínica particular, porque no se tenía el servicio de radiografías en ese mismo nosocomio de Vicente Guerrero.

La señora Morales junto a su familia acudieron a la clínica particular, para tomar las radiografías al recién nacido y tanto el médico de esa clínica como el pediatra del IMSS, certificaron que el bebé tiene dos fracturas en la clavícula.

El director del IMSS junto a los médicos expresó que las fracturas que presenta el bebé se curarán con reposo y conforme vaya transcurriendo el tiempo. Y quieren dar de alta a la madre como a su hijo, sin hacerse responsables de la negligencia médica.

También el personal médico del IMSS advirtió que no hicieran grande el problema, por lo que los familiares están temerosos. Lo único que piden es que se atienda al recién nacido y se firme una responsiva por parte del Instituto.

La señora Saira Iveth Morales se encuentra en la camilla siete del hospital del IMSS del municipio de Vicente Guerrero, desde el día 23 a la fecha.