Decenas de comerciantes cerraron un carril de la avenida 20 de Noviembre para denunciar que son afectados por la obra de cableado subterráneo.
Los locatarios pertenecientes a la Unión de Comerciantes Establecidos del Centro Histórico, se manifestaron este lunes.
Eduardo Bernal, dirigente de la organización, informó que personal del Municipio había informado que la instalación tardaría tres días por sección.
Sin embargo, «una sección ya lleva casi 20 días, o sea no vemos la eficiencia», señaló.
El representante de los comerciantes afectados, aclaró que no están en contra de la obra sino de la forma en que se ha procedido.
Por esto exigieron que el personal trabaje durante la noche y los fines de semana, ya que presentan un retraso.
Respecto a la afectación, precisó que el acordonamiento de las calles, las polvaredas y otras condiciones que genera la obra, han ocasionado una reducción del flujo de personas y vehicular. Esto ha traído como consecuencia un impacto en las ventas de los comercios del centro. «Han bajado 40 por ciento», puntualizó.
El efecto podría significar la estocada final para locales que están a punto de la quiebra por lo que dijo que «la ‘cuesta de enero’ no era momento para esto».