Por: Manuel Díaz
Es positivo el permiso que otorgó el presidente de México para la compra de las vacunas contra el COVID-19, porque es más económico para los empresarios adquirir la dosis en comparativa con el dinero que se desembolsa para la compra de pruebas de los empleados, manifestó el presidente de CANACO, Mauricio Holguín.
Indicó que cada uno de los empresarios paga las pruebas de los empleados para detectar el COVID-19, agregando que es mucho más costoso el pagar cada una de las pruebas para detectar el COVID-19, que adquirir la vacuna contra la enfermedad, de ahí la importancia de que la iniciativa privada comercialice las vacunas.
«Al aplicar la vacuna contra el COVID-19 en cada uno de los trabajadores, representaría en gastos la quinta parte de lo que se invierte en la adquisición de pruebas para detectar el Coronavirus, se debe tomar en cuenta que la aplicación de la prueba contra el COVID-19 es para detectar si la persona está contagiada por la enfermedad, por lo que se debe de realizar de manera periódica».
Con la vacuna contra el COVID-19 se asegura la inmunidad de la persona a la enfermedad, por un periodo largo de tiempo, con la garantía de asegurar la salud del propio trabajador y de los clientes, debido a estas realidades es positivo que el Gobierno Federal permita la venta de vacunas contra el COVID-19, para acelerar el proceso de vacunación que permita la reactivación económica.
Venta de vacunas contra COVID-19 permitiría inmunizar a empleados