Este 2023 será el año más caluroso jamás registrado en el planeta, según un informe difundido en la 28 Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP28) que se celebra en Dubái, Emiratos Árabes; cumbre donde participa México.
Todavia le quedan unos días a este diciembre, pero los científicos anticipan que será el año más caluroso, la temperatura global de este año será más de 1,4 grados centígrados más cálida que los niveles preindustriales.
Durante su participación en el diálogo ministerial de alto nivel sobre la creación de sistemas alimentarios resilientes al agua del COP28, el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos, compartió que el pasado mes de septiembre, la temperatura subió casi tres grados en comparación al promedio histórico.
Fue el mes más caluroso del que se tenga registro en las últimas siete décadas, afectó la producción de maíz y frijol, granos esenciales en la dieta de las familias mexicanas.
“México se ha visto afectado por la reducción de la disponibilidad de agua para la agricultura, debido a las persistentes sequías propiciadas por el cambio climático”, agregó.
- En Durango, se estima que, de las 220 mil hectáreas destinadas a la producción de frijol, solo se sembraron 50 mil hectáreas, tierras que, desafortunadamente por el clima adverso, se perdieron en su gran mayoría y se reporta un bajo rendimiento en promedio; se estima una cosecha de 15 mil toneladas (datos de SAGDR).
Víctor Villalobos, en su participación en la COP28, informó que México lleva a cabo diversos proyectos para reducir los impactos negativos de las sequías en los próximos ciclos agrícolas con la implementación de tecnología para un mejor aprovechamiento del agua.
Las acciones en materia de tecnología, innovación, investigación y desarrollo; tienen el objetivo de asegurar la gestión efectiva y sostenible de los sistemas hídrico y alimentario.
Se estableció un grupo de trabajo intersectorial para abordar el uso del agua en tierras irrigadas, mediante la estimación de la huella hídrica y la mejora de la eficiencia del riego.
Mediante un proyecto piloto se generan sistemas de monitoreo digital, que incluyen datos agrometeorológicos satelitales y sensores de suelo que integran información sobre la humedad del suelo y el contenido de nutrientes.
Aunado a esto, se capacita a los agricultores para que utilicen esta información, que estará disponible y actualizada en sus teléfonos celulares, y tomen mejores decisiones sobre el uso de agua y fertilizantes, resaltó el funcionario mexicano ante ministros de Agricultura de distintos continentes.
Resaltó que este proyecto, en una etapa inicial, beneficiará a cuatro mil agricultores y cubrirá 13 mil hectáreas de maíz, trigo, avena y sorgo y se espera ampliarlo, a partir del próximo año, a otras regiones e incluir otros cultivos.
Este esfuerzo contribuye a la implementación de la Estrategia Nacional de Suelos para la Agricultura Sostenible (ENASAS), que reconoce que el manejo sostenible del suelo y el uso óptimo del agua van de la mano, con la innovación y la transferencia de tecnología para los agricultores.
El compromiso de México para reducir la huella hídrica en el sector agrícola y promover prácticas sostenibles de manejo del suelo, con herramientas que ayudarán a los agricultores de pequeña y mediana escala a tomar mejores decisiones, basadas en la ciencia, junto con la tecnología y las innovaciones.
En el Diálogo ministerial de alto nivel tambien participaron los ministros de Cambio Climático y Medio Ambiente de los EAU, Mariam Almheiri; el de Agricultura y Ganadería de Brasil, Carlos Fávaro; el de Agua y Riego de Jordania, Raed Abu Soud; el de Agricultura de Chile, Esteban Valenzuela, y el de Agricultura y Riego de Somalia, Ahmed Madoobe Nunow.
También, el viceministro de Agricultura y Silvicultura de Turquía, Ebubekir Gizligider; la subsecretaria de Investigación, Economía y Educación de Estados Unidos, Chavonda Jacobs-Young; el vicepresidente de ONU-Agua, Johannes Cullmann, y Lloyd Day, por parte del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura.
El diálogo reunió a ministros de Agricultura y Agua, el sector privado y organizaciones internacionales para mostrar políticas innovadoras, finanzas, tecnología y soluciones de investigación y desarrollo que aborden las crisis interrelacionadas de alimentos, agua y clima.
Por: Antonio Gaytán