Llama arzobispo de Durango, Faustino Armendariz, a realizar examen de consciencia y a preguntarse como sociedad qué se está haciendo para reducir indicadores en casos de violencia, como el más reciente feminicidio-suicidio registrado en una agencia de viajes de la ciudad capital.

El representante eclesiástico manifestó que actualmente los duranguenses presentan un tejido social lastimado, que se debe de resarcir paso a paso, con la cooperación de la ciudadanía en general.

«Los feminicidios y las muertes violentas han originado un tejido social lastimado, por eso es tarea de todos reconstruirlo y retomar los valores. Todo feminicidio, así como todo suicidio, es lamentable y sin duda, tenemos que alzar la voz y exigir a las autoridades acciones concretas en políticas de prevención, para cuidar barrios y colonias y evitar la propagación de drogas o simplemente en la generación de empleos, que muchas veces ocasionan una economía muy complicada y difícil que lleva a muchos a atentar contra su vida». detalló el arzobispo.

Refirió que se tiene un tejido social descompuesto y lastimado, por ello desde la iglesia siguen sembrando los valores del evangelio. Faustino Armendariz abundó en que también le toca a las familias sembrar los valores de respeto, de dignidad y de ver con claridad que es lo qué se tiene que hacer.

Finalmente, añadió que es necesario imponer medidas de disciplina, un valor muy importante a rescatar para llevar a las nuevas generaciones por el camino de bien y así colaborar para sanar el tejido social que es una tarea de todos.

Por: Fabiola Nevárez

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