Por: Antonio Gaytán
Más de 500 familias sin ingresos para comprar alimentos por cierre de plazas públicas en la ciudad de Durango, medida que implementaron las autoridades para frenar la propagación del Coronavirus COVID-19, “no nos oponemos, estamos de acuerdo, nos queremos irnos a casa pero con condiciones de supervivencia”, manifestó Mario Eduardo Serrano, uno de los afectados.
La Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) ordenó colocar vallas metálicas en las plazas públicas para evitar que la población siga paseando exponiéndose al virus SARS-CoV-2, medida que deja sin posibilidad de trabajar a boleros, músicos y comerciantes.
Las plazas cerradas son: Plaza de Armas, plazuela Baca Ortiz, jardín Hidalgo, jardín Morelos, Corredor Constitución, además de los parques Guadiana y Sahuatoba.
Mario Serrano pide a la sociedad no atacarlos, porque también son ciudadanía y están expuestos a la pandemia, por ello, reitera que están de acuerdo con retirarse a sus hogares pero les preocupa qué van a comer en estas próximas semanas, “no queremos ir a morirnos de hambre”.
Los comerciantes están dialogando con los gobiernos, de los tres niveles, no quieren nada regalado porque no les alcanza una despensa, lo que solicitan son prestamos que les garanticen su sustento familiar y cubrirlos cuando regresen a sus actividades; su planteamiento es crear una mesa de diálogo y acordar qué solución se puede dar.
Los afectados tiene contemplado manifestarse este día alrededor de las 11:00 horas en la plaza de Armas y esperar la llamada del gobernador José Aispuro y del alcalde Jorge Salum.