En Durango hay alrededor de 70,000 ejidatarios, de los cuales, entre un 28 a 30 por ciento son mujeres, declaró la representante del Registro Agrario Nacional (RAN), Andrea Delgado del Real, en el marco del evento «Mujeres por Acceso a la Tierra».
La mayor riqueza natural de nuestro país se encuentra en las regiones rurales de propiedad social, ejidos y comunidades agrarias; paradójicamente también las mayores condiciones de pobreza, injusticia, desigualdad y exclusión, particularmente para las mujeres.
Mujeres que son portadoras de una gran herencia biocultural, conocedoras de sus territorios, de los recursos, de su manejo, conservación y uso, protectoras del patrimonio familiar y muchas veces sostén de sus familias.
El Gobierno de la República, a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), promueve el proyecto «Mujeres por el Acceso a la Tierra» para impulsar el reconocimiento de los derechos agrarios de las mujeres.
La representante del RAN en Durango, Andrea Delgado, comparte que han creado una Red Nacional de Mujeres Agraristas y han logrado sumar a las primeras 150 ejidatarias, el objetivo es dar información sobre sus derechos y fomentar que más mujeres, sobre todo jóvenes, se incorporen a las tareas de sus comunidades y sean productivas.
Generalmente las mujeres entran al ejido a una edad adulta y es por viudez, ya cuando su esposo fallece y es cuando ellas acceden a la tierra, y luego, por comentarios de la misma familia son despojadas de ese derecho porque se lo pasan al hijo.
Lo que se esta haciendo es captar a todas las mujeres que reciben ese derecho ya se por sucesión o tramite administrativo a que no se deshagan de el porque es su patrimonio; se les informa como pueden participar de manera activa en sus ejidos y comunidades.
«Yo les explico, lo que tenía su esposo, ese derecho, ahora lo ejerce usted y puede participar en una asamblea, en el comisariado, de participar en un contrato de arrendamiento, de aparcería, de su usufructo de ese derecho», apuntó.
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Por: Antonio Gaytán