Nace el Conservatorio de Música de Durango y estará a cargo del extraordinario pianista mexicano Anatoly Zatin, quien fungirá como director, y la maestra Vlada Vlasilieba, como coordinadora académica.

Se ubicará en una institución de renombre para la educación, como es el Centro Escolar Revolución, en el barrio de Tierra Blanca.

Inicia con un programa de Maestría en Interpretación Musical: Piano, posteriormente se ofrecerá la Licenciatura en Teoría e Historia de la Música y Cursos de Perfeccionamiento Musical en Piano y en Dirección Orquestal.

Adicionalmente, este semestre se abrirá también un programa de talentos para niños y jóvenes, en piano y violín.

El titular de la Secretaría de Educación del Estado de Durango (SEED), Guillermo Adame, destacó que será un centro de élite destinado a la formación de profesionales en este ámbito.

Acompañado del subsecretario de Educación Media Superior y Superior, Francisco Javier Ibarra Guel, y de la directora de Educación Básica B, Blanca Emilia Reyes. El secretario Adame Calderón dijo que la música, como una de las bellas artes, es una forma de expresión que nos lleva de un lado a otro. Es decir, de la hilaridad al romanticismo; de la reflexión a explosión.

Cabe destacar que la historia de la humanidad va de la mano con la creación musical.

Sirve tomar algunos ejemplos, como la fuerza revolucionaria de las composiciones de Beethoven y la música de Juventino Rosas con el vals “Sobre las olas” que conquistó los corazones de la crítica europea en el siglo XIX, a pesar de no ser recocido en su momento por ser mexicano. A pesar de ello, ahora es una obra clásica de nuestro país.

En Durango, tenemos grandes exponentes de la música como Ricardo Castro o Silvestre Revueltas, por hacer mención de algunos.

Por ello, el interés del Gobernador Esteban Villegas Villarreal es potencializar el valor de la música como una forma de expresión, de formación integral e inclusive de vida para las generaciones que hoy son nuestro punto de partida, nuestro interés.

«Soy un convencido de que la música rompe esquemas y barreras; convierte a las personas en mejores seres humanos y nos ayuda a expresarnos y vivir a plenitud», concluyó.

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Por: Antonio Gaytán