Por: Raquel Carreón Lugo

Una apasionada en el mundo del atletismo, siempre viendo por los corredores, llena de raíces duranguenses, ella es Olga Ávalos Tesillos.

“En la primaria un entrenador me invitó a correr, pero como era en las tardes mi papá nunca me dejó, ya en la preparatoria, en el Instituto Comercial Bancario empecé a correr conocí a amigos en el parque y en las mañana me iba a correr”; declaró la exolímpica, en el programa Pico de Gallo, conducido por Carlos Garza Limón, director de Noticieros Garza Limón.

Nacida en Ignacio Ramírez en Guadalupe Victoria, a los cinco años emigró a Durango capital, en donde hizo grandes marcas en el mundo del atletismo.

Asistió a los Juegos Olímpicos en 1992, en Barcelona, en la prueba de la maratón, sin embargo por cuestiones del periodo menstrual tuvo que abandonar la competencia, ya que estaba en riesgo su integridad física.

Cuando estuvo en Barcelona, en los primeros kilómetros iba punteando, pero en el kilómetro 20 tuvo que decirle adiós a la competencia, “no me tomé la pastilla para el dolor, no me sentía nada bien, así que tuve que salirme”.

Un mes después de la Olimpiada estuvo en el maratón de Japón, donde registró un tiempo de 2:30.19 horas, donde hacía mucho calor pero aún así la duranguense lo hizo de una gran manera, en próximos años también estuvo en aquellas tierras compitiendo en medio maratón, realizó 1.08 hora, récord mexicano que aún está intacto.

Para 1995 en Nueva York hizo el maratón culminando en segunda posición.

Después de eso regresó a Durango, y la pista atlética del Parque Sahuatoba lleva su nombre, ya que ella hizo una aportación de cinco mil dólares.

Al lado de Adriana Carbajal, una de sus grandes amigas compartió innumerables entrenamientos de mil 500 y 800 metros.

Olga Ávalos conoce a Brian Appell, su esposo, se conocieron en el banco donde ella trabajaba, “me regaló unos tenis, el corría mil 500, solamente sabía que era corredor, continué con mi equipo de Durango, Adriana Carbajal, Ricardo Terán y Genaro Monsivais, Germán de la Cruz”.

LOGROS

Participó en los Juegos Panamericanos en la Habana, Cuba, donde se gana derecho a participar, maratón esto en 1991, el tiempo registrado fue de 2.43.36 horas.

“Cuando me fui de Durango en colorado en 1987 tuve mi primera hija, quise volver a correr, después de seis meses corrí un maratón y en pura subida”.

Después me fui a Alemania, estuve en el equipo militar y nos mandaron para Sttutgarth durante tres años, Brian siempre compitiendo en carreras de campo traviesa de mil metros, ahí fue donde dije que yo quería ganar, ya no quería ser una más del montón, incluso llevaba a mi bebé en la pista en su carrera, mi esposo siempre me daba el aliento, así fue que inicié.

FUERA DE SERIE

La mejor marca de la duranguense fue en Nueva York con 2:28.56 horas.

Su primer campeonato nacional fue en Jalapa, ganó en 10 mil metros en aproximadamente 34 minutos y con ello el pase para el Panamericano.

El primer maratón que realizó fue en Minessota en 1989, pero después en un Campeonato Nacional de Estados Unidos tuvo una lesión en el metatarsal, tuvo que continuar con su entrenamiento con la bicicleta dos horas por la mañana y dos horas por la tarde.

“En Atlanta no era de las favoritas, todas se fueron muy rápido, corrí 10 mil metros en pista, no pasé a la final, no es mi prueba y cuantos no quisieran estar ahí, quedé como en el lugar 18”, manifestó.

Llegó a entrenar series de 40×400, 20×1000, “tuve que entrenar yo sola, en las repeticiones llegaba un momento en que decía que ya no podía, difícil con mi entrenar, es  difícil ser constante en el tiempo de cada repetición, en mil metros llegué a hacer 3.05 minutos, eran repeticiones extenuantes, en distancias largas eran de 35 kilómetros.

WHITE ROCK

Los duranguenses Fernando Daniel Martínez Estrada y Liliana Saraí Martínez Estrada, son los pupilos de Olga Ávalos y Brian Appell con el equipo de White Rock, entrenan en Alburqueque, Estados Unidos junto con otros tres atletas más, dos de Aguascalientes y otro de Veracruz.

Fernando Martínez acaba de ganar la medalla de oro en los Juegos Panamericanos en Lima 2019.

Los corredores entrenan dos veces al día, los mismos entrenadores los trasladan al lugar de su entrenamiento, comen, viven y duermen en la casa de Brian y Olga, quienes solventan todos los gastos para que estén con las comodidades que un atleta de alto rendimiento se merece.

El equipo busca la ayuda para continuar con este gran proyecto que traerá corredores olímpicos, los interesados pueden comunicarse con Adriana Carbajal al 6181584502.

Ella y su esposo pretenden estar en diciembre de nueva cuenta en tierras duranguenses donde darán una conferencia.