Por: Brenda Maurer

La pandemia de COVID-19 ha cobrado la vida de más de 110 trabajadores de la salud en el país, porque los médicos, enfermeras y camilleros son la primera línea de batalla en la atención a enfermos de Coronavirus, expuso Luis Gabriel Torres, presidente del Observatorio por los Derechos de la Salud, al asegurar que eso a la gran mayoría no les quita la vocación de salvar vidas.

Ahorita el riesgo que tienen los trabajadores de salud sigue siendo muy alto; sin duda un acierto que tuvo el Gobierno fue retirar a sectores de riesgo por edad y condiciones de salud, porque si no hubiera sido de esa forma, ahorita hablaríamos de muchos más muertos.

Hay que decir que en México el alto número de fallecidos también tiene que ver con los problemas de salud que hay como diabetes e hipertensión, además de los malos hábitos en alimentación y sedentarismo.

El especialista resaltó que se debe reconocer el esfuerzo que han hecho las autoridades de salud para equipar a lo trabajadores de salud que están en contacto con los pacientes sospechosos y confirmados.

“El equipo es de buena calidad pero lógicamente no se les da a todos, únicamente a quienes están en la línea COVID”.

Finalmente, dijo que la población puede ayudar en mucho a los médicos quedándose en casa para que así haya el menos número de casos de contagio, “claro que entendemos que hay muchas personas que viven al día y tienen que trabajar, pero si no hay necesidad, no salgan”.