Este año serán recordados en la iglesia católica duranguense a dos jóvenes mártires, que al profesar su fe, fueron martirizados.

El vocero de la Arquidiócesis de Durango, Noé Soto Valdés explicó que al tratarse del Año de la Juventud, buscarán recordar la memoria y la fe de dos mártires que fueron asesinados durante la guerra cristera a inicios del siglo pasado.

Se tratan de David Roldán Lara y José Salvador Lara Puente, ambos nacidos en Chalchihuites, Zacatecas pero que ingresaron a estudiar en Seminario de Durango. Ambos tuvieron que desertar de sus estudios en teología debido a la situación económica que enfrentaban sus familias y ahí comenzaron a trabajar en la mina El Conjuro, en Zacatecas.

“Son dos jóvenes que murieron en la Arquidiócesis de Durango para defender su fe. Ellos estudiaron en el seminario y salieron, hicieron su vida familiar. Pero murieron por ser testimonio de su fe”, detalló Noé Soto Valdés, .

David y Salvador fueron beatificados el 22 de noviembre de 1992, por el Papa Juan Pablo II, quien presidió la ceremonia de su canonización y fueron presentados también como ejemplos de vida cristiana a más de tres mil jóvenes, durante la clausura de la XVII Semana de la Juventud, en el Cerro del Tesoro, lugar del santuario de los mártires mexicanos.

Por: Karla Tinoco