Por: Nallely Urbina
En el municipio de Durango, se tiene documentado un total de siete mil 500 familias que sufren pobreza patrimonial.
Se trata de personas que no tienen una vivienda adecuada a sus necesidades, por ejemplo padecen hacinamiento, precisó José Flores, director del Instituto Municipal de la Vivienda (Inmuvi).
Otro de los factores de riesgo es el uso de materiales frágiles con los que construyeron su casa, indicó.
En esta situación se encuentran tres mil 200 familias, cuyas viviendas son de materiales endebles. Asimismo, recordó que cuatro mil 500 se encuentran en hacinamiento.
Cabe mencionar que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el hacinamiento se registra cuando no hay espacio suficiente en una casa, para la salud y la vida en familia.
Según el Director, para abatir este tipo de pobreza se contempla una inversión de 52 millones de pesos, presupuesto con el cual se realizarán mejoras a mil 400 viviendas. El 75 por ciento de estas se enfocará a reducir el hacinamiento; construirán 300 cuartos para ampliación de vivienda y 44 baños.
Las cifras muestran que el mayor problema de pobreza patrimonial se registra en la zona rural.