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Por: Brenda Maurer
El abandono en el campo es lacerante. Hay muchas necesidades y la inflación les está pegando duro a las familias campesinas, lo cual se refleja en su mesa. “En algunas comunidades la gente ya solo hace dos comidas al día porque no alcanza para más; la pobreza alimentaria ha aumentado”, expuso el diputado Ricardo López Pescador, coordinador de la fracción parlamentaria del PRI.
El desayuno, comida y cena ya son cosa del pasado. A las familias ya no les alcanza para alimentarse tres veces al día, por ello, optaron por hacer un desayuno ya tarde, así como la comida a media tarde y es todo.
Todos sabemos que ha subido mucho el precio del maíz, la tortilla, el huevo; es decir, lo básico para la alimentación de los mexicanos. En el caso del medio rural las cosas son más difíciles porque hay que llevarles los productos por caminos de terracería que implican jornadas muy largas, lo que encarece las mercancías y los servicios públicos.
López Pescador, enfatizó que las familias están sobreviviendo, por lo que se requieren programas sociales que realmente beneficien a las familias. Agregó, que hay quienes se quejan de que los programas sociales lleguen a los jóvenes porque ellos, en lugar de llevar ese recurso a casa o ayudar al gasto familiar, se lo beben y los gastan en otros temas.
El legislador subrayó que es necesario que se hagan programas específicos para las familias campesinas, a fin de garantizarles un nivel de bienestar básico; y que a partir de ahí ya busquen avances productivos.
Finalmente, comentó que los diputados del PRI se reunieron con Roció Rebollo, secretaria de bienestar del estado, quien les dio a conocer que están diseñando programas regionales, específicos y bien dirigidos para estas familias que están en pobreza alimentaria.
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