Tercera ola de calor «da la puntilla» al ganado, un sector severamente golpeado por una extensa sequía que inició en 2022, se agravó en 2023 y que, en este 2024, se sufren sus consecuencias, declaró el presidente de la UGDR, Rogelio Soto Ochoa.
Según investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), a partir del miércoles 22 de mayo, por la entrada de la tercera ola de calor y la falta de corrientes de viento, viviremos 15 días con las mayores temperaturas en la historia del país.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pronostica -para este fin de semana- temperaturas por encima de los 45 grados Celsius en 15 de los 32 estados del país. En el caso de Durango, se espera que el termómetro llegue hasta los 40 grados.
El presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD) reiteró que venimos arrastrando una sequía desde 2022 y que, debido a la falta de lluvias tuvimos poca captación de agua en los bordos de abrevadero, en las presas y se han abatido los mantos freáticos en donde hay pozos pecuarios; ahora con las altas temperaturas es la muerte.
«Es la muerte para cualquier ser vivo; nosotros como seres vivos si no tomamos las debidas precauciones, son altas temperaturas que nos van a provocar un golpe de calor, imagínese en los animales que no tienen defensa, que están a lo que encuentran en el suelo como agua y forraje, entonces esto viene a darnos la puntilla de lo que veníamos arrastrando».
La UGRD desde 2023 ha venido concientizando a las y los productores a que mantuvieran solo aquellos animales que pudieran sostener con el pasto y agua que poseen en sus agostaderos y sus cosechas; la gente fue responsable y se vendieron alrededor de 70 mil vientres, incluyendo sementales de desecho, de lo contrario, ante estas olas de calor y sequía, es ganado que hubiera muerto.
¿Es necesario seguir despoblando el hato, acelerar este proceso? El líder Rogelio Soto considera que no se trata de acelerar, mucho menos de obligar. Se debe seguir concientizando a los productores que reducir su carga animal debe hacerse a voluntad y con responsabilidad, de lo contrario, lo hará la naturaleza.
Además, ahorita, el forraje está muy caro y el acarreo de agua es mucho gasto. Mantener animales improductivos no es negocio.
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Por: Antonio Gaytán
