Por: Manuel Díaz

Las muertes por COVID-19, el cansancio del personal médico, las áreas hospitalarias para contagiados, la medicina preventiva para superar la enfermedad y que el virus continuará, aun cuando se comience a aplicar la vacuna, fueron los temas abordados por Julio Gutiérrez Méndez, delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Durango en la emisión del programa sabatina «Pico de Gallo» que conduce el director de Noticias de esta empresa, Carlos Garza Limón.

En 203 unidades médicas, se atiende al 60 por ciento de la población total de Durango, tres hospitales fueron reconvertidos para destinar un solo piso, para la atención de pacientes contagiados por COVID-19, informó Gutiérrez Méndez.

La reconversión para atender a los pacientes contagiados por COVID-19, se llevó a cabo en los Hospitales General de Zona número 1, 46 y 51 pertenecientes al IMSS, lo que ocasionó la reducción en la atención de otras especialidades.

Muchas personas entran en pánico, cuando se habla de COVID-19, pero no deben atemorizarse, porque al seguir las recomendaciones de la sana distancia y llevar una vida sana, se reducen las probabilidades de contagio y de fallecer por la enfermedad.

La prevención es la mejor medicina para no contagiarse de COVID-19, es la respuesta para las personas que preguntan sobre los medicamentos para tratar la enfermedad.

Una alimentación sana, actividad física, uso de cubrebocas, lavado constante de manos, evitar lugares concurridos, son parte de la prevención para no contraer el COVID-19 y no desarrollar comorbilidades.

Hipertensión, diabetes, sobrepeso y obesidad, son las enfermedades crónico degenerativas o comorbilidades, por ello es importante prevenirlas y atenderlas, para evitar el contagio y fallecimiento por COVID-19.

La mejor medicina para prevenir el COVID-19, es una vida saludable

No consumir cafeína en ninguna de sus presentaciones, como son café y refrescos, tampoco alimentos procesados, no exceder la ingesta diaria de alimentos, evitar el sedentarismo y ejercitarse, son parte de las medidas preventivas, para no contraer y sobrevivir al COVID-19.

Cuando un derechohabiente contrajo el COVID-19, y padece una comorbilidad y tiene además, padecimientos en los riñones, será complicado que sobreviva, aun cuando se otorguen los cuidados requeridos en el IMSS, debido a que está debilitado el cuerpo de la persona y el sistema inmune no responde de forma adecuada.

Es mayor el riesgo de que una persona adulta no se recupere, porque tiene comorbilidades, pero esto no excluye a los jóvenes, que también se contagian y se registran fallecimientos, a consecuencia del Coronavirus.

En la región Laguna, se desarrollan enfermedades pulmonares obstructivas crónicas, debido a que son zonas donde existe mayor cantidad de polvo y se provocan alergias, asma y EPOC, que en combinación con el COVID-19, normalmente no les va bien, pero es una situación que sucede en el mundo, no es exclusiva de Durango ni del país.

Ejercitarse al pedalear la bicicleta estática, caminar alrededor del sillón, entre otras actividades deben desarrollarse, para evitar el sobrepeso y cada una de las comorbilidades, que provocan complicaciones con el COVID-19.

Asimismo, se puede practicar deporte en alguna zona libre, donde no existe aglomeración de personas, para disminuir el riesgo de contraer el COVID-19, pero acatando siempre los lineamientos de sana distancia e higiene.

Cansado personal médico por extensas jornadas de trabajo

El IMSS cuenta con dos áreas para atender a los pacientes COVID-19, una se destina para recibir los casos sospechosos y la otra para atender a aquellos que dieron positivo al Coronavirus y requieren hospitalización.

El procedimiento para detectar COVID-19, consiste en tomar  la muestra, si cumple criterios pasa a área de observación, luego se practican análisis clínicos, se toma una placa de rayos X o alguna tomografía, dependiendo del estado de salud del paciente.

Si el paciente requiere estar con apoyo de oxígeno, se le colocan puntas de oxígeno. La enfermedad es cruel y posiblemente requerirá de un apoyo ventilatorio, por lo que el personal de salud decide si el paciente deberá subir a hospitalización.

No entran familiares en ninguna de estas dos áreas, para prevenir la propagación del COVID-19, se toman datos personales del paciente, que consisten en el número de celular de los familiares y correo electrónico, para establecer comunicación con sus seres queridos.

Los médicos del área COVID-19, cuentan con tabletas y conectividad a internet, para comunicarse de forma virtual con los familiares del paciente. A veces se retrasa la llamada, debido a que el médico debió atender un llamado de emergencia con un paciente contagiado por COVID-19.

Cuando el paciente hospitalizado, requiere ser intubado, debido a que se deterioró la salud, a consecuencia del COVID-19, se realiza de forma inmediata la comunicación con sus familiares, con el objetivo de informar las decisiones que se tomaron, o por qué el paciente falleció por COVID-19

Al fallecer un paciente por COVID-19, se activa el protocolo, que consiste en elaborar el certificado de defunción, comunicarse con la familia y con la funeraria, se realizan los trámites de pensión y se orienta a familiares.

Descartó el Delegado del IMSS. que no se cuente con disponibilidad de camillas y de medicamentos para atender a los pacientes contagiados por COVID-19.

El problema principal consiste en que el personal médico y de enfermería se encuentra cansado, debido a las largas jornadas de trabajo, esto sucede en las dos áreas de atención para pacientes, los sospechosos y contagiados por COVID-19.

«Nos preocupa el personal médico porque tiene comorbilidades, sobrepeso, hipertensión, diabetes o están embarazadas y fueron retirados. Si antes se tenían, por ejemplo, 10 enfermeras, en un servicio, ahora se cuenta con ocho», mencionó Gutiérrez Mèndez.

Contagio de COVID-19 y comorbilidades en médicos

Quizá dos enfermeros se contagiaron de COVID-19 y solo quedan seis enfermeros, pero mantienen el compromiso con el derechohabiente, aunque se aumente la carga de trabajo.

Además dijo, que se garantiza el equipamiento para el personal que labora en área COVID-19, se otorga el equipo de protección, que consiste en caretas, lentes, overol, cubrebocas N-95, batas y  botas.

Personal de otras áreas recibe otra protección, porque no se encuentran en zonas de alto riesgo, siendo la razón por la que no a todos se otorga el cubrebocas N-95.

Sobre los fallecimientos por COVID-19, en lo que refiere a los pacientes que fueron enviados a sus casas, no se cuenta con una estadística base, porque presentan variaciones las barras informativas de los datos estatales, federales e institucionales.

Especificó que se toma la decisión de enviar a su casa a un paciente que contrajo el COVID-19, debido a que los síntomas que presenta no requieren hospitalización, pero se realiza la observación que si aparece cierta sintomatología, deberá regresar de inmediato al hospital.

Sin embargo, la gente no vuelve en condiciones severas y argumentan que tomaron la decisión de no regresar, porque les dio miedo al ver al médico vestido “como astronauta”, y deciden regresar cuando el cuadro clínico es demasiado grave.

«Se sigue estudiando el virus, hasta el momento, como todos los virus, puede mutar. Sí va a durar más tiempo a este año el Coronavirus en el medio ambiente», complementó.

Afirmó que el COVID-19 permanece en el mundo y al salir la vacuna, no quiere decir que el problema se terminará al día siguiente.

Finalmente, Gutiérrez Méndez, señaló que es importante reducir la movilidad social para evitar el aumento en los contagios, «es triste que Durango ocupe los primeros lugares en el desplazamiento de personas».

Prohibido abrazarse en fiestas organizadas en salones de eventos