“Al que mal inicia mal le va” y ese es el caso de los organizadores de la Feria Nacional Durango. Desde antes buscamos acercamiento con el director Lauro Arce y nunca aceptó, entonces hubo problemas con los músicos y con taxistas; faltó mantenimiento como se vio en el abanico amarillo y además vendedores foráneos de alimentos vinieron a hacer sus pillerías, señaló Rolando Álvarez Peña, dirigente estatal de la Federación de Trabajadores Independientes (FTI).

“Si queremos que quede muy claro que son vendedores foráneos los que vienen a hacer sus pillerías a Durango. A ellos les ofrecen desde enero los lugares e incluso, muchos tienen la exclusividad y ya vemos lo que vienen a hacer; como es el caso de las brochetas”.

El líder de los comerciantes subrayó que la organización es pésima, considerando que hay cancelación de artistas y la concesión de la velaría. Incluso los empresarios rechazaron participar, por lo que ponen una pista de hielo que la gente solo puede usar por 10 minutos.

“Definitivamente, no es lo mismo las callejoneadas que las Fiestas de la Ciudad”. Álvarez Peña añadió que para el próximo se tiene que replantear la organización de la FENADU.

“Desde el año pasado dijimos que se tenía que integrar un consejo amplio, con gente de experiencia y que tenga ganas de trabajar. No necesitamos a gente que se suba al ladrillo y maree”, aseguró.

“Necesitamos que los organizadores se pongan las pilas, nombren un consejo y que se vean las modificaciones a las instalaciones, porque de comerciales no tienen nada. Se tiene que hacer una reingeniería y una reorganización”, finalizó.

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Por: Brenda Maurer