En el Gobierno de Esteban Villegas, se le apuesta al arte y la cultura para la reconstrucción del tejido social en todos los municipios, coincidieron maestros y alumnos, miembros de Semilleros Creativos al presentar su talento en diversos espectáculos, en el marco de la visita de la titular de la Secretaría de Cultura de México, Alejandra Frausto a Durango.
Y es que, los artistas engalanaron el programa previo a la firma de convenio con el Gobierno Estatal para fortalecer el conocimiento y la creatividad de los niños y jóvenes, donde destacaron el impulso que realiza el mandatario estatal a este rubro.
El hecho de que sea un gobernador artista y que entienda el tema cultural, da un impulso para que todo el talento que hay en Durango se fortalezca, manifestó el profesor Francisco Márquez, del Semillero Creativo de Literatura de Vicente Guerrero, al subrayar que con la firma de este convenio viene una etapa cultural muy buena para el estado.
Arath Carrillo Sarmiento del mismo Semillero Creativo, reiteró que gracias a la labor de esta Administración, se ha podido consolidar este grupo que es de los más activos de Durango, donde niños y jóvenes se desempeñan en las actividades recreativas de su agrado.
Con esta firma recibiremos más el apoyo del Gobernador, es indispensable que se involucren a los jóvenes y se dé apoyo a estos espacios, ya que generan transformación y se está viendo un cambio a través del arte, apuntó Claudia del Semillero de Circo de Gómez Palacio.
Este tipo de eventos habla del interés que tiene el Gobierno con la cultura, ya que en Durango hay talento, y con esto se pueden abrir las puertas para que más niños y jóvenes para brindarles la oportunidad de conocer el arte, añadió Alfonso Guzmán de Gómez Palacio.
Dylan Galpichan y Nadia de los Monteros, también de Gómez Palacio, agradecieron el apoyo del Esteban, al comentar que se sienten felices que los sigan apoyando, ya que al involucrarse el Instituto de Cultura del Estado, se les otorgan más presentaciones para que la gente conozca lo que hacen.
Por: Antonio Gaytán
