Por: Manuel Díaz
La iglesia católica se encuentra alegre por la celebración del día de La Virgen de Fátima, una madre que invita a acercarnos a Dios para propiciar la paz, compartió el vocero de la Arquidiócesis, Noé Soto.
Fue la Virgen de Fátima quien se apareció a tres pastorcitos, un día trece de mayo, en Portugal, en la gruta de Cova de Iría.
Durante la aparición, la virgen pidió de manera especial a los tres pastorcitos, que se acercaran al rezo del Santo Rosario y a la veneración de nuestra madre en el cielo.
Para que se pidiera por la prevalencia de paz y el fin de la guerra, los tres pastorcitos que llevaba por nombre Lucia, Jacinta y Francisco, obedecieron el consejo de la madre de Dios.
En la actualidad se requiere del don de paz, porque existe mucha violencia en el país, incluso entre las mismas familias.
A través del rezo del Santo Rosario, es una forma de acercarse a Dios, para que se pueda dar respuesta a las oraciones de paz.