Matrimonio que mató a su pequeño hijo y el que asesinó a su padre no andaban drogados
12/08/2020 - Hace 5 años en DurangoMatrimonio que mató a su pequeño hijo y el que asesinó a su padre no andaban drogados

Durango, Dgo.- Aunque muchas personas tal vez están en la creencia de que el hombre que la semana pasada mató a su padre en Santiago Papasquiaro, Durango, y que el matrimonio que en Lerdo, Durango, asesinó a su hijo de dos meses de edad andaban drogados, la verdad es que no; lo hicieron consientes.
Como se informó en este mismo medio, fue la tarde del jueves cuando en el poblado 10 de Abril, municipio de Santiago Papasquiaro, Durango, el señor Florentino Enríquez Morales, de 62 años de edad, tras una discusión con su hijo Samuel, de 38 años de edad, este le pegó un golpe en la cabeza y le quitó la vida.
Al día siguiente, también entre la tarde-noche, Alejandra, de 19 años, llevó al Hospital General de Lerdo, Durango, a Alejandro, su pequeño de dos meses de edad, a quien los doctores trataron de reanimar, pero ya estaba muerto.
Las investigaciones y estudios realizados por personal dela Vicefiscalía de la Laguna, es que el bebé murió de hambre y golpes, según la investigación, así es, desnutrido y martirizado, incluso se comentó que tenía una mordida en la espalda y huellas de agresiones físicas anteriores.
Como presuntos responsables de esa bestial acción, inicialmente fue detenida Alejandra y posteriormente Alejandro, su esposo de 28 años, padre del pequeño sacrificado.
Sobre el caso del parricida, que fue detenido por la Policía Investigadora de Delitos (PID) días después, se comprobó que este no es adicto al alcohol ni a ninguna otra droga, y que el motivo que lo orilló a matar a don Florentino, fue por las constantes agresiones a su madre.
En torno al filicidio, el matrimonio que lo cometió tampoco andaba bajo los efectos de la droga, incluso se sabe que Alejandra tiene otros tres hijos, dos de los cuales se los llevaron los abuelos y otro se lo dio a una vecina, de lo contrario, tal vez hubieran corrido la misma suerte.
Entonces pues, tenemos dos casos en los que, contrario a otros similares que ocurren y en los que está de por medio el consumo de droga, fue muy diferente y lo único que privó fue el rencor de un hijo agraviado ante el maltrato de su madre y la maldad del matrimonio, que hasta por medio de un video quedó demostrado que no querían al bebé y su intención de matarlo.