Durango, Dgo.- Al borde del sepulcro se encuentra un menor de edad que sufrió severas lesiones en la cabeza y otras partes del cuerpo, al rodar por las escaleras del Cerro de los Remedios
Adán Misael Covarrubias González, de siete años de edad, quien vive en la colonia José Angel Leal, es quien la tarde del lunes en compañía de sus padres bajaba dichas escaleras cuando tropezó, cayó y empezó a rodar hasta que otras personas lo sujetaron, pero ya había sufrido las heridas.
Eran aproximadamente las 18:300 horas cuando con la premura del tiempo, su madre María Martha González Ruiz y su papá lo trasladaron al Hospital del Niño, que se encuentra relativamente cerca del lugar del accidente, sobre el bulevar Guadiana, pero ante la gravedad de las heridas lo transfirieron al Hospital Materno Infantil (HMI).
En este nosocomio, los médicos le apreciaron traumatismo craneoencefálico severo, fractura con hundimiento de parietal del lado izquierdo y varios golpes en su cuerpo, por lo que su estado de salud es considerado como muy grave.