Por Pilar Aguilar

Con mucha frecuencia, padres de familia reportan a través de las redes sociales la “misteriosa” desaparición de su hija o hijo menores de edad, al tiempo que piden a la comunidad su apoyo para localizarlos… Cuando el reporte llega a la autoridad y esta solicita información al padre, madre u otro familiar, casi nunca manifiestan la realidad que vive el chico y que lo orilló a salirse del domicilio, lo que obviamente no ayuda en mucho a la policía para lograr  su pronta localización… Para no entrar en muchos detalles, aunque el reporte en las redes sociales causa alarma, pues de ahí surgen muchos comentarios y especulaciones en el sentido de que se “están robando niños”, por fortuna regularmente los menores extraviados o perdidos aparecen sanos y salvos, pues solo se habían ido con un amigo o  simplemente se la pasaron vagando, pero la percepción ciudadana es de que se lo «habían robado»… En estos días se vive uno de esos casos, el de «Chicharito», un niño de 13 años llamado Alejandro, que desde el sábado en la noche se salió de su casa y hasta este miércoles en la tarde no había regresado…Escuché y leí la entrevista que mi compañero Manuel Díaz le hizo al señor Víctor, tío del muchachito, quien manifestó que les causa extrañeza el que el menor haya hecho eso, porque su conducta en lo general es buena, que es tranquilo, “no tiene amigos”, “le gusta mucho estar en su casa”, “no es vago”, “no es de los que se pierde” y además comentó que “la familia no tiene solvencia económica como para pagar un rescate en caso de que lo hayan secuestrado”… Si todo eso es verdad, entonces no se entiende el por qué «Chicharito» se salió de su domicilio la noche del sábado, si ya traía puesta su ropa de dormir y estaba a punto de a irse a la cama… Más bien da la impresión de que algo pasó en el seno familiar, alguna discusión, vio algo que no le pareció correcto y abandonó el hogar  inmediatamente, sin siquiera avisarle a su mamá, con la que según su tío, había cenado poco antes… A decir del entrevistado, de este caso está enterada la Fiscal general Ruth Medina Alemán, también el Secretario de Seguridad Pública Francisco Javier Castrellón Garza, los que de inmediato pusieron a trabajar a su respectivo personal para que buscaran y encontraran a Chicharito, ya que su ausencia mantiene angustiada a su familia, la que públicamente le pide que regrese de donde se encuentre y a la sociedad le pide que ayude a encontrarlo… Sin asegurar que este sea el caso, sinceramente creemos que la mayoría, si no es que todos los menores que se salen de sus casas, se debe a la falta de atención para con ellos de parte de sus padres, los que no se dan cuenta o no quieren enterarse con qué tipo de personas tienen contacto, que la comunicación familiar no es la ideal y que desestiman cualquier situación irregular que observan… Por la tranquilidad de la familia de» Chicharito», hacemos votos porque pronto regrese con bien a la casa de la que misteriosamente el sábado salió, aunque que para evitar situaciones como estas, en las que tanto la FGE como la SSP dedican horas o días en busca de menores que ante un berrinche abandonaron sus domicilios, es importante que en cada uno de los hogares los papás y mamás hagan lo que les corresponde y que cuando su hija o hijo menor desparezcan, es indispensable que cuenten a la autoridad realmente lo que sucedió, sin omitir ningún detalle, para que esta tenga elementos con que iniciar firmemente una investigación…

La madrugad de este miércoles se movilizó personal de la Fiscalía General del Estado (FGE), para atender el reporte relacionado con un órgano humano que alguien dejó en el cofre de una camioneta estacionada en las calles Porras, entre Mascareñas y Pino Suárez… Al acercarse los agentes policiacos primeramente acordonaron el área y luego el médico legista examinó cuidadosamente lo que era un corazón, pero enseguida llegó a la conclusión que no pertenecía a un  humano, sino a un cerdo, puerco, cochino o marrano, pero lo que se ignora es que si la persona que lo dejó lo hizo con la intención de amedrentar a alguien o simplemente para jugarle una broma…

Si Dios quiere nos leemos nuevamente mañana y no se les olvide que yo les deseo el doble de lo que ustedes me desean a mi.