Por: Pilar Aguilar
Muy oportuna para los usuarios de cajeros automáticos fue la acción realizada durante la madrugada de este viernes por la Dirección Municipal de Seguridad Pública (DMSP), para evitar que sean robados por los delincuentes. Y es que durante la permanente vigilancia que los elementos de esa corporación mantienen en las instituciones bancarias y en dichos cajeros, descubrieron que esta clase de sujetos que solo están pensando cómo ganar dinero sin hacer el más mínimo esfuerzo, colocaban objetos casi imperceptibles en las ranuras de esas máquinas, para que cuando alguien vaya a retirar determinada suma, esta se quede “atorada” y no salga, por lo que al abandonar el cajero el usuario, el delincuente llega y tras las maniobras que solo él sabe, obtiene el recurso y escapa. Es así como durante las últimas horas, el personal de la DMSP arrestó a cuatro individuos dedicados a esa ilícita actividad, a los que ya puso a disposición de la autoridad competente. Ante tal situación y debido a la posibilidad de que otros estén operando de la misma forma, la DMSP recomienda a los interesados que antes de realizar una operación de retiro de dinero, verifiquen que la ranura por donde se entregan los billetes se encuentre libre y sin ningún obstáculo, para evitar ser víctimas de un posible robo. La forma de operar es la siguiente: el “el trampero”, como se les conoce a estos individuos, aprovechando los tiempos en que el cajero está solo, coloca en la ranura una laminita y se retira. Posteriormente el usuario llega y hace todo su trámite normal, pero al final no sale el dinero solicitado y muchos deciden retirarse, siendo en ese momento que los maleantes ingresan y retirar la “trampita” que han colocado y se apoderan de los billetes que fueron retenidos en la ranura. Bueno, pues como aunque un cuarteto de estos sujetos, que por cierto, traían todo su equipo para operar, incluso portagafetes con la leyenda de algunas instituciones bancarias, esto para que creyeran que eran empleados de las mismas, ya fue puesto a buen recaudo por la gente de Oscar Galván Villarreal, se ignora de momento si en esta ciudad se encuentran operando otros “tramperos”, razón por lo que se ha redoblado la vigilancia, pero el citado funcionario hizo un llamado de alerta a quienes retiran dinero en los cajeros, para que extremen precauciones. Sin lugar a dudas, la captura de esos cuatro representa un fuerte golpe a ese tipo de delincuentes, que venían operando con ese novedoso sistema, pero que fue detectado dada la capacidad y actualización en labores policiacas que le ha brindado a su personal el comisario Galván Villarreal, quien en el tiempo que tiene al frente de la DMSP, ha logrado una total transformación que ha redundado en beneficio para la ciudadanía… Tres hechos de tránsito que ocurrieron entre la tarde del jueves y madrugada de este viernes, dejaron solo pérdida económica y el primero fue a las 14:10 horas en prolongación Pino Suárez y bulevar de la Juventud, cuando un taxi marca Hyundai, tipo I-10, modelo 2014, colores blanco y verde, conducido por el joven Jonathan, de 26 años, se impacta en la parte posterior de una camioneta marca Ford, línea Explorer, modelo 2009, color rojo, que era manejada por el señor José, de 42 años… El segundo ocurrió a las 21:20 horas en el crucero formado por las calles Río Lerma y Río Huyuapan, de la colonia Valle del Sur, donde al pasarse la señal de alto una camioneta marca Chrysler, tipo Journey, modelo 2009, color gris, conducida por María Francisca, de 38 años, provoca ser chocada por otra de la misma marca, pero tipo Pick-up, cuatro puertas, color blanco, modelo 2017, que era manejada por el señor Felipe de Jesús, de 56 años… El tercero fue a las 00:30 horas en calle Zarco, frente al número 212, pasando Paloma, luego de que una camioneta marca Ford, Explorer, modelo 2000, color negro con arena, fue dejada abandonada después de chocar y derribar un arbotante, para enseguida estrellarse contra un árbol… Si Dios quiere nos leemos nuevamente mañana y no se les olvide que yo les deseo el doble de lo que ustedes me desean a mí.