Por: Pilar Aguilar

El viernes 16 de Agosto se celebraron los 63 años de vida de La Voz de Durango, un medio de comunicación impreso que nació como Semanario y que gracias a la dedicación y esfuerzo de su fundador Salvador Nava Rodríguez, lo convirtió en diario. El Diario de los Durangueños, como se le conoce también ha sido un semillero de periodistas que tras haber dado sus primeros pasos en la reporteada en ese impreso, adquirieron los conocimientos necesarios para sobresalir en ese periódico y otros en los que laboraron los años siguientes, pero también brillaron y brillan en otras áreas ajenas al periodismo. Por la Redacción de La Voz y bajo la Dirección de don Chava, pasaron Didier Bracho Soto, quien se desempeñó como Subdirector y posteriormente, durante prolongado tiempo fue Director del Siglo de Durango. Juan Francisco Arroyo Herrera, que después sería juez Penal, abogado de la Secretaría de Educación, procurador de Justicia, director municipal de Seguridad Pública (DMDS), entre otros cargos. José Ramón Hernández Meraz, que después de ser reportero en La Voz, fue Delegado de Indeco, diputado local y hasta su muerte, rector de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED). Fernando Meraz Mejorado fue otro, del que luego sería uno de los mejores reporteros de Excélsior, que cubrió problemas bélicos en el Medio Oriente (reportero de guerra), por algún tiempo se encargó de la fuente de la Presidencia de la República y siete años consecutivos se ganó el Premio Nacional de Periodismo. Sus hermanos Jesús Angel, Antonio y Eduardo Meraz Mejorado, de los que el primero fue jefe de información de La Voz y luego corresponsal de Excélsior, los dos restantes fotógrafos de varios medios y en la Administraciones de José Ramírez Gamero, Toño fue el jefe de fotografía de la Dirección de Prensa y con Ismael Hernández Deras, Lalo desempeñó la misma labor. Guillermo Rodríguez Gallegos, quien actualmente escribe para la Organización Editorial Mexicana (OEM), pero que luego de su paso por La Voz fue subdirector de Comunicación Social en la Administración de Héctor Mayagoitia Domínguez, dependencia de la que ocupó la titularidad en parte de la gestión de José Ramírez Gamero, laboró en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SSP) y durante muchos años ha sido catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Mariano Alvarado Martínez, quien desde hace muchos años es reportero de El Sol, creador de la columna Tip Tip, es otro exreportero de La Voz. Jorge Blanco Carbajal, propietario del actual director de Contacto Hoy,  su hermano Gerardo Blanco Carbajal , quien es el dueño de la revisa Durango Informativo, son dos más y Eduardo Castro Romero, el que luego sería locutor, comentarista de radio y fundador de su propia revista. Miguel Angel Vargas Quiñones, quien de La Voz brincó a la Dirección de Turismo, también en el mandato de Mayagoitia Domínguez, luego prestó sus servicios en el área de prensa de la Presidencia de la República y actualmente es el propietario y director de Contexto de Durango. Víctor Rubén Hernández Guerrero, destacado analista político y Director de La Semana Ahora, es uno más de los que laboraron en la Voz, así como Mayela Gallegos Aguilar, Maricela Olvera Pérez, Juan Antonio Valles, Gilberto Niebla, son otros de los que pasaron por lo que muchos conocen como la Universidad del Periodismo, en la que también estuvo Julio Carlos Láinez Rojas, también ejercieron el periodismo en La Voz y todos los nombrados son solo unos cuantos de la interminable lista. Después del fallecimiento de don Salvador Nava Rodríguez, fueron sus hijos Salvador, Rosa María y Juan Nava Stenner los que en distintas épocas han estado en la dirección de este medio en el que un servidor se inició siendo apenas un adolescente, primero en los talleres y después como reportero. Es por eso que al cumplirse los 63 años de existencia, a todos ellos les agradezco el que me hayan permitido aprender lo que en otros medios he puesto en práctica. Felicidades por estos 63 años de lucha diaria, en la que también participó la señora Guillermina Stenner de Nava, la inseparable compañera de Don Salvador, así como sus otras dos hijas, Guille y Buga. Reitero mi agradecimiento a La Voz de Durango y a la familia nava Stenner… Si Dios quiere nos leemos nuevamente mañana y no se les olvide que yo les deseo el doble de lo que ustedes me desean a mí.