Por: Pilar Aguilar
Nos parece muy importante que algunos de los funcionarios de la nueva Administración municipal, lejos de llegar hostigando a sus empleados, tal como ocurrió al inicio del trienio anterior, se dediquen a preguntarles sobre sus necesidades, no solo para que cumplan mejor con sus tareas, sino en busca de mejores condiciones de vida para sus familias. De esa positiva actitud que ha sido vista con buenos ojos por los trabajadores de las dependencias del Gobierno que ahora encabeza Jorge Salum del Palacio, nos hemos enterado en voz de los propios empleados de al menos tres direcciones. Una de estas es precisamente la de Seguridad Pública municipal, a cargo de Antonio Bracho Marrufo, quien está consciente de que una persona bien pagada, dotada del equipo suficiente y en buenas condiciones, así como dándole un excelente trato, arroja mejores resultados y es precisamente por lo está haciendo un estudio de las necesidades que tienen todos y cada uno de los empleados a su mando, tanto operativo, como administrativo, para cubrirlas lo antes posible y así cuenten con las herramientas necesarias para que cumplan mejor con su trabajo. Lo mismo sucede en la Dirección Municipal de Protección Civil (DMPC), ahora a cargo de un “bombero de carrera”, como lo es el comandante Gustavo Paredes Moreno. Y es que por las venas del el nuevo director corre la sangre de tragahumo por haber ingresado a las filas de la corporación cuando era apenas un adolescente. Sus casi tres décadas en la institución le ha permitido palpar las necesidades y conocer a cada uno de sus elementos, a los que ha visto ingresar como voluntarios y después convertirse en personal de paga. El interés de este funcionario porque sus colaboradores trabajen dentro de un clima de armonía y respeto, con el equipo necesario y con retribuciones de acuerdo a la importancia de su responsabilidad, es debido a que los ve como parte de su familia y además, está consciente de que son personas que también traen tatuado en el corazón el logotipo que los distingue y que son capaces de dar su propia vida en el desempeño de su función que siempre es en beneficio de las familias duranguenses de distintas clases sociales. Otro que también está haciendo lo mismo porque conoce perfectamente el tema y el trabajo que realizan quienes tiene como colaboradores, es el de Comunicación Social, Benjamín Flores Salas, por eso ha solicitado a su equipo humano la lista de necesidades para cubrir excelentemente todas las labores del alcalde Salum del Palacio, un hombre que a base de hechos que beneficien a la sociedad, sin protagonismos ni altanerías, pretende actuar con el fin de dejar una huella de trabajo y prosperidad para sus gobernados. Que bueno que los directores de esta Administración llegan con el firme propósito de apoyar a sus subordinados y no de hostigarlos, como se hizo en algunas áreas de la gestión que recién concluyó, lo que habla del sello humano que se le está imprimiendo a esta gestión… Sobre los accidentes viales que ocurren en esta ciudad y que afortunadamente solo dejan pérdidas económicas, uno de estos sucedió a las 14:30 horas en el crucero de las céntricas calles Gómez Palacio y Regato, cuando un automóvil, marca Nissan, tipo Platina, modelo 2007, color gris, conducido por Janeth Alejandra, se impacta contra una camioneta, marca Volkswagen, modelo 2018, color negro, que era manejado por el señor Ricardo, de 53 años… Otro que también solo arrojó daños materiales, fue protagonizado en prolongación Nazas y calle Valle de Los Andes, del fraccionamiento Valle del Mezquital, donde una camioneta marca Ford, Pick-up, color rojo, conducida por quien dijo llamarse Javier Adrián, de 45 años, choca contra otra marca Nissan, Pick-up, modelo 1991, color blanco, que manejaba la señora María Mercedes, de 57 años… Un tercero sucedió a las 17:30 horas en las calles Aquiles Serdán y Porras, luego de que al invadir carril un autobús marca Mercedes Benz, modelo 2006, colores blanco con azul, conducido por Juan Francisco, choca contra una camionetas marca Honda, CRV, modelo 2008, color arena, que manejaba Ana Vasti… Si Dios quiere nos leemos nuevamente mañana y no se les olvide que yo les deseo el doble de lo que ustedes me desean a mí.