Tener un empleo se ha convertido en un reto para más de 38 mil 500 personas que buscan un trabajo, pero no lo encuentran.
Ésta es la cantidad de duranguenses que se reportaron como desempleados y con deseos de laborar.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el problema del desempleo fue uno de los que incrementó el año pasado. Y empresarios admiten que, para perjuicio de las familias, este 2021 podría comportarse igual.
Mauricio Holguín, presidente local de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), recordó que, en diciembre pasado se «rompieron» récords en desempleo.
Y esta tendencia se prevé continúe este 2021, «un año económicamente complicado», dijo.
La pandemia ha traído graves dificultades económicas para las familias, así lo muestra el incremento del desempleo en el estado.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), reveló que el incremento de personas sin trabajo fue de 1.6 por ciento en 2020.
Cómo se divide la población
En 2019, había un millón 837 mil 965 duranguenses, mientras que el año pasado, la población aumentó a un millón 853 mil 296.
De ellos, en 2019 se precisó que 810 mil 77 personas eran la Población Económicamente Activa (PEA), es decir, la que tenía 15 años y más y podía trabajar.
Esta cantidad se redujo el año pasado a 798 mil 476, pero lo que disminuyó aún más fue la población ocupada.
Según la estadística, pasó de 783 mil 835 personas con trabajo en 2019, a 759 mil 913 duranguenses con trabajo en 2020.
De esta manera, se estableció que el desempleo aumentó 1.6 por ciento de un año a otro. En 2019 había una tasa de desempleo de 3.2 y pasó a 4.8 por ciento en 2020.
En este contexto, actualmente se prevé que en Durango hay 38 mil 563 personas desempleadas, en busca de un trabajo.
Más allá de las cifras, se traduce en familias sin ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) en México, 9.8 millones de personas no pueden cubrir el gasto de alimentos, tras la crisis provocada por la pandemia.
La COVID-19 causó el cierre de negocios y con ello el desempleo que hoy se padece.
El representante de Canaco, apuntó que el año pasado, «se cayeron» más de 10 mil empleos formales. De estos fueron recuperados cerca de dos mil 500 para mitad de año; sin embargo, al finalizar el 2020 hubo otro desplome.
«Se viene el cierre de diciembre y ahí se cae la dinámica de contrataciones y se ponen en riesgo más empleos», explicó.
La mayoría es subordinado
Las estadística oficial muestra que en la entidad lo que predomina es la subordinación. El 69.2 por ciento de la PEA son trabajadores subordinados y remunerados, lo que se traduce en 526 mil 42 duranguenses que dependen de alguien.
Solo el 5.8 por ciento son empleadores, es decir 44 mil 281, mientras que 20.9 por ciento dijo trabajar por su propia cuenta, o sea 158 mil 952.
Esta dependencia cobró relevancia el año pasado cuando se presentó el cierre de miles de negocios en la entidad, de los cuales algunos pudieron recuperarse, pero cientos fueron clausurados permanentemente.
El empresario local puntualizó que el año pasado, Canaco tuvo conocimiento del cierre de mil 500 negocios, lo que indica el despido de miles de duranguenses.
A pesar de los esfuerzos, no todos pudieron reabrir. Dijo «sabemos que 300, 400 pudieron reabrir sus puertas».
Es evidente la relación entre desempleo y pobreza, no solo por la falta de ingresos para cubrir las necesidades básicas, sino porque la encuesta demostró que, cada vez hay peores condiciones laborales.
Del total de duranguenses con trabajo el año pasado, solo 41.6 por ciento tuvieron acceso a instituciones de salud, la cifra es menor en 10 mil 445 personas respecto a 2019. Lo que indica que no hay empleo y el que existe puede no cumplir con los derechos básicos del trabajador.