Pueblo Nuevo, Durango. – El turismo en tiempos de pandemia evolucionó; los negocios dedicados al ramo turístico en este 2020, tuvieron que mejorar sus servicios, principalmente de sanidad para poder atender a sus clientes y no declararse en la bancarrota, por las medidas anti COVID-19.
Desde inicio de año, cuando se dieron a conocer los primeros casos a nivel nacional del virus SARS–CoV–2, las autoridades de los tres niveles de Gobierno tomaron sus medidas para evitar la propagación de este virus, entre los cuales el sector turístico fue de los primeros afectados.
En marzo, los titulares de los medios de comunicación informaban de las primeras medidas como de sana distancia, el uso del cubrebocas, así como el cierre de comercios no esenciales; en el municipio de Pueblo Nuevo dio inició la creación de cercos sanitarios, principalmente en lugares como la comunidad La Ciudad, lugar donde se encuentra el mayor número de centros turísticos y cabañas en alquiler, pero en este mes no se permitieron el ingreso de ninguna persona ajena a esta comunidad.
Con el paso del tiempo, y con la semaforización por número de contagios de COVID-19, se declararon aperturas parciales, desde el 25 hasta el 50 por ciento, únicamente a los centros turísticos que cuentan con ciertas normas de la pandemia para poder atender al turismo.
El administrador del centro turístico “Quinta el refugio”, Eliazar Reyes Camacho, manifestó que la pandemia les trajo mucho conocimiento de cómo tratar al turismo, mejorar las prácticas de sanitización y limpieza, las cuales siempre son prioridad, pero en estas circunstancias son fundamentales.
«Actualmente, el turismo es menor y tenemos que invertir en las medidas como tapetes, gel y mejores artículos de limpieza para poder atender a los visitantes en medio de esta pandemia, pero es mejor generar algo de ingresos con el 50 por ciento de la apertura, que cerrar».
Declaró que dejar de generar recursos, empleos y terminar declarando en quiebra el negocio que les ha costado mucho mantener, no es opción, por lo que acatan todas las medidas para seguir manteniendo el negocio, con la esperanza de que vendrán tiempos mejores.
En los últimos meses, el personal de Turismo municipal ha realizado reuniones a la distancia o de manera individual con los dueños y encargados de los diversos espacios para dar a conocer cuáles son las medidas y protocolos a seguir y así recibir a sus clientes y poderlos atender de una manera segura, tanto para proteger al personal, como a los visitantes en medio.
En las distintas aperturas que se han autorizado por las autoridades, siempre se deja pendiente el servicio de restaurante, solo comida a la habitación; si los visitantes pretenden salir del complejo turístico a reabastecerse de víveres, se tiene la opción de que el personal de las caballa realice las compras, con la intención de mejorar el servicio y evitar movilidad y posibles contagios, así como las áreas comunes están cerradas o sin que convivan los turistas entre ellos, ya que cada familia puede tener su propio espacio.
Alondra Vega, titular de la Dirección de Turismo en el municipio, indicó que para inicio del 2021 realizarán una reunión con los dueños de dichos lugares, para no dejar caer la economía de este sector; «no nos podemos quedar estancados, tenemos que evolucionar y mejorar el servicio en el tema de salud y esperar tiempos mejores».
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