Pueblo Nuevo, Durango. – La tecnología de la mayoría de los aserradero en la región es tecnología obsoleta o de hace aproximadamente 50 años, sin embargo, en el municipio existen tres aserraderos con tecnología de punta de primera generación tales como el que se encuentra en el ejido Pueblo Nuevo, San Pablo y Chavarría Viejo.

Con este tipo de industria se tiene un ahorro del 50 por ciento de energía eléctrica, se produce mucho menos aserrín y leña que son los principales desperdicios y un aserradero de este tipo es mucho más seguro para los trabajadores y se puede reducir la nómina considerablemente.

Este tipo de industrias producen más madera con menos volumen de pinos, generan mucho menos desperdicios y tienen un ahorro mayor, por lo que son cada vez más rentables estos negocios.

Desde el 2017 se encuentra en operaciones el aserradero de tecnología de última generación, en la localidad las Adjuntas que pertenece al ejido Chavarría viejo con el cual se reducen los desperdicios como el aserrín y leña, el empleo en estos lugares es de menor riesgo, existe una disminución de la nómina y generan mejores sueldos por la mano de obra calificada con sueldos superior al salario mínimo.

En esta fábrica el sueldo de un operador de la máquina principal oscila entre los 3 mil 800 y 4 mil pesos por semana.

Las anteriores máquinas con las que contaban con tecnología de hace 50 años tenían un promedio de 40 empleados y hoy en día este aserradero trabaja con 24 empleados, los otros 16 empleados no se despidieron ya que se construyó una astilladora donde se emplearon a estas personas, así como se generaron 6 empleos directos más en la secadora de madera que se acaba de instalar en este mismo patio.

Para construir la nueva secadora de madera en este ejido y poder darle un valor agregado a la madera que se produce en el aserradero la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) aportó 2.5 millones de pesos, el Gobierno del Estado destinó 500 mil pesos y 1 millón de pesos que pesó más el ejido.

Miguel Alvarado presidente de la Agrupación de Silvicultores, destacó que a través de esta agrupación se han capacitado en la elaboración de proyectos sustentables y gracias a la colaboración del gobierno federal, estatal y al financiamiento de distintas intuiciones han logrado forjar varias historias de éxito como estas en ejidos de este municipio de Pueblo Nuevo.

El entrevistado aseguró que mejorar toda esta maquinaria no ha sido fácil ya que es necesario “nadar contra corriente”, luchar contra la apatía y temor de invertir por parte de algunos integrantes de cada una de las asambleas de todos los ejidos, pero afortunadamente los ejidos que ya cuentan con estas tecnologías están contentos con los resultados.

Este tipo de impulsos son rentables por todos los ahorros que se pueden tener, pero la mayor aportación es la disminución de desperdicio y el buen aprovechamiento forestal para que pueda ser rentable por otros 100 años o más, ya que esto es posible si se tiene un manejo responsable.

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