Guadalupe Victoria, Durango.- En el marco del Día Mundial contra la Obesidad, la nutrióloga local Andrea Barajas proporcionó recomendaciones útiles para tener una salud equilibrada por medio de una sana alimentación, que ayudará a prevenir esta enfermedad crónica y progresiva, en la cual una persona acumula una cantidad excesiva de grasa corporal que puede ser perjudicial.
«Lo que ayudará a reducir de forma natural el colesterol y los triglicéridos es principalmente el consumo de frutas y verduras, pues contienen fibra que ayuda a la buena digestión de los intestinos y es importante disminuir el consumo de empaquetados y alimentos embutidos», señaló en entrevista.
Este padecimiento se origina debido a que existe un desequilibrio energético entre las calorías consumidas y gastadas, es decir, la persona consume alimentos y bebidas con alto contenido energético y no realiza suficiente actividad física.
El sedentarismo, sumado a los patrones alimenticios poco saludables, a una cantidad insuficiente de sueño y altos niveles de estrés, son factores que pueden incrementar el riesgo de tener obesidad.
La obesidad es prevenible y reversible. Para llevar un estilo de vida saludable es esencial modificar algunos hábitos y perseverar en ellos. Algunos de estos son:
- Reducir la ingesta de alimentos con alto contenido calórico, procedente de azúcares y grasas en exceso.
- Evitar consumir alimentos procesados y ultraprocesados.
- Aumentar el consumo de alimentos naturales como las frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
- Preferir el consumo de agua potable por encima de las bebidas que contienen azúcares, tales como jugos, refrescos, aguas saborizadas y lácteos con azúcar.
- Realizar diariamente entre 30 y 60 minutos de actividad física.
- Masticar adecuadamente los alimentos para absorber mejor los nutrientes durante la digestión.
- Dormir entre 7 y 8 horas diarias en condiciones adecuadas.
- Cuando se tiene un bebé, dar lactancia natural exclusiva desde el nacimiento hasta mínimo los seis meses de edad, para reducir el riesgo de sobrepeso y obesidad.
- Enseñar a las y los niños a comer de manera saludable, siguiendo los hábitos mencionados anteriormente.
Si una persona no modifica su estilo de vida, este problema de salud pública puede ocasionar otras comorbilidades o enfermedades crónicas, tales como diabetes, hipertensión, padecimientos cardiovasculares, nefropatías y hasta cáncer.
Por: Edsson Zamarripa