El planeta Mercurio pudo haber albergado formas de vida simples, pues partes de su subsuelo fueron capaces de formar química prebiótica, informó el Planetary Science Isntitute.

“Los hallazgos significan que Mercurio tenía una gruesa corteza rica en volátiles, posiblemente pero no necesariamente rica en agua, en este lugar”, explico el investigadoir Alexis Rodríguez.

La región del planeta presenta terrenos caóticos del gran impacto Caloris, a causa de los los grandes volúmenes de volátiles en la corteza.

El primer planeta más cerco al Sol llega a una temperatura de 430 grados centígrados durante el día, y en ausencia de una atmósfera, cae a -180 grados centígrados por la noche.

La clave del descubrimiento fue el desarrollo de dichos terrenos caóticos pues persistieron hasta hace aproximadamente aproximadamente 1.800 millones de años, dos mil millones de años después de que se formara la cuenca Caloris.

“Este hallazgo indica que enormes volúmenes de volátiles de la corteza se convirtieron en gas y escaparon de la corteza superior del planeta sobre una superficie ligeramente más grande que la de California”, agregó el coautor Gregory Leonard del Departamento de Ciencias Planetarias.

Además de la conclusión de la posibilidad de vida, las áreas exhibidas pueden acceder a material rico en volátiles, que al estudiarlo más pueden revelar más noticias sobre la historia del planeta.

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