En una decisión que sacude al mundo tecnológico, un juez determinó este miércoles que Meta Platforms, previamente conocida como Facebook, deberá comparecer en juicio por una demanda interpuesta por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos. La demanda busca la disolución de la compañía, acusándola de adquirir Instagram y WhatsApp con el objetivo de aplastar a la competencia emergente en las redes sociales.

La disputa legal entre Meta y la FTC se remonta al año 2020, durante el gobierno de Donald Trump, cuando la comisión presentó su denuncia argumentando que Facebook había actuado de manera ilegal para mantener su monopolio en el mercado de redes sociales. La FTC alega que Meta, en su momento Facebook, pagó un alto precio por Instagram en 2012 y por WhatsApp en 2014 con la intención de eliminar potenciales amenazas en lugar de competir en el mercado móvil de forma justa.

La defensa de Meta frente a las acusaciones

La compañía, por su parte, ha defendido su posición argumentando que la acusación se basa en una visión demasiado limitada de los mercados de redes sociales, obviando la competencia de plataformas como TikTok de ByteDance, YouTube de Google, X y LinkedIn de Microsoft.

Este caso se ha convertido en uno de los cinco litigios más importantes en los que los reguladores antimonopolio de la FTC y el Departamento de Justicia están persiguiendo a las grandes compañías tecnológicas. Amazon y Apple también están siendo demandadas, mientras que Google, perteneciente a Alphabet, se enfrenta a dos denuncias, siendo una de ellas aquella en la que recientemente un juez determinó que estaba obstaculizando ilegalmente la competencia en el mercado de motores de búsqueda en línea.

La decisión del juez de enviar a Meta a juicio por las adquisiciones de Instagram y WhatsApp destaca la importancia que los organismos reguladores están dando al tema de la competencia justa en el mundo digital, marcando un hito en la lucha contra los monopolios en la era de la tecnología.

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