Retro – Revisitamos Plants vs. Zombies
Hay conceptos en los videojuegos que son sencillos en apariencia, pero brutalmente efectivos. Esta fue la primera impresión que tuve de Plants vs. Zombies en 2011, cuando tuve la oportunidad de probarlo en la secundaria.
A pesar del anticuado hardware disponible en mi vieja escuela, tenía la potencia suficiente para correr juegos como Halo: Combat Evolved, Half Life o Plants vs. Zombies. Tener esta facilidad era increíble, porque los ratos muertos en el taller de cómputo siempre se iban en partidas que alcanzaban las 2 horas fácilmente.
El juego de las plantas fue un fenómeno singular. Para ese tiempo, el hobbie de los videojuegos no estaba popularizado entre la mayoría y había quienes no encontraban diversión en sentarse frente a una computadora. No obstante, el título de Pop Cap Games atrapó a todo el mundo que lo probaba.
Y es que no era muy difícil engancharse. El mecanismo principal del juego era fácil de agarrar: toma plantas, ponlas en el jardín y detén la invasión. Claro, conforme avanzas en la campaña y vas desbloqueando nuevos escenarios, la cosa se complica pidiendo una mayor estrategia.
Aún con todo, el balance estaba tan bien hecho que, al llegar a etapas avanzadas, ya eras lo suficientemente bueno. Con esto podías pasar horas experimentando y romper el juego tampoco era imposible. Más pronto que tarde salía a relucir la estrategia de dos filas de girasoles, dos filas ofensivas y una defensiva por si acaso.
El diseño artístico también se lleva sus méritos. El aspecto caricaturesco se sentía familiar y la música, aunque irritante por momentos, era una melodía fácilmente reconocible. Al final, todo este contenido se envolvía con un tono gracioso que aprovechaba bien el sentido del humor y te dejaba unas carcajadas sinceras.
Es triste ver en retrospectiva lo que EA hizo con la franquicia. Su primer juego es una joya incluso para los estándares actuales. Probablemente eso es lo más triste, que un experimento como Plants vs. Zombies es único y será muy difícil que se repita, al menos no en esta época.
Quizá te interese:
Más de 5.3 mil millones de teléfonos terminarán en la basura en 2022
