Durante el relevo de la antorcha olímpica, un incidente marcó el sábado cuando el pebetero designado para mantener encendida la llama durante toda la noche no prendió, aparentemente debido a un fallo en el sistema de combustión.
En Manosque, al norte de Marsella, la nadadora Ophelie-Cyrielle Etienne, medallista de bronce en Londres-2012, intentó encender el pebetero en dos ocasiones, sin éxito, en el tercer día de los 78 programados para el recorrido por Francia.
Este inconveniente técnico representó una diferencia respecto a los dos primeros días del relevo, que se llevaron a cabo en Marsella y Toulon.
A pesar del contratiempo, está previsto que unas 10 mil personas participen en el transporte de la llama a través de más de 450 ciudades en toda Francia, incluidos los territorios de ultramar como Guadalupe, Nueva Caledonia y la Polinesia francesa.