La tarde de este martes, tres valientes activistas decidieron tomar acción y lanzar pintura roja sobre las estatuas de presidentes estadounidenses ubicadas en el Paseo de los Presidentes, en la avenida de la Constitución, en el Capitolio de San Juan.

Este acto de protesta fue en respuesta a los recientes insultos dirigidos a la isla caribeña, específicamente el calificativo de «isla basura» dado por el comediante estadounidense Tony Hinchcliffe durante un mitin del expresidente Donald Trump.

Tito Román, uno de los activistas responsables de la protesta, manifestó que esta era una expresión del pueblo puertorriqueño ante la política de odio liderada por el partido Republicano y Donald Trump. Aunque su valentía fue aplaudida, Román fue detenido por las autoridades tras realizar la acción.

Las estatuas en cuestión son monumentos dedicados a los presidentes estadounidenses que han visitado la isla en funciones oficiales.

Este acto de vandalismo simboliza el descontento y la indignación de los puertorriqueños ante los comentarios despectivos hacia su tierra.

En contraposición, el reconocido artista Bad Bunny decidió honrar a su isla natal con un emotivo vídeo que resalta las riquezas naturales y culturales de Puerto Rico, así como sus exponentes internacionales en diversos campos como la política, el deporte y la música.

La clase política de Puerto Rico ha rechazado enérgicamente los comentarios de Hinchcliffe, y numerosos artistas han mostrado su apoyo al país caribeño, llegando incluso a llamar a votar por la candidata demócrata Kamala Harris.

El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, no dudó en calificar como «basura» las palabras de Hinchcliffe e instó a aquellos que lo aplaudieron a sentir vergüenza por faltar el respeto a Puerto Rico.

Por otro lado, se informó que Tony Hinchcliffe tenía planeado presentarse esta semana en distintos lugares de Puerto Rico, como Gala en San Juan y Norbertos Piano Bar & Lounge en Humacao, pero ambas actuaciones fueron canceladas tras el incidente.

Cabe destacar que, a pesar de la situación, los puertorriqueños residentes en Estados Unidos podrán participar en las elecciones del próximo 5 de noviembre, teniendo la oportunidad de hacer oír su voz y expresar su opinión sobre los candidatos involucrados.

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