La fiscalía acusó al director de la morgue de la Facultad de Medicina de Harvard y otras tres personas de comprar y vender restos humanos que robaron de cadáveres donados a la universidad.

Según la acusación, Cedric Lodge tomó “cabezas, cerebros, piel y huesos” de los cuerpos que se usaban para investigación médica y los vendió en internet a compradores en Pensilvania y Massachusetts.

Los fiscales alegan que Lodge usó su posición como director del “Programa de donaciones anatómicas” de la Escuela de Medicina de Harvard para desmembrar los cadáveres sin el consentimiento de sus familias.

Los estudiantes de Harvard utilizan los cuerpos donados para estudiar y practicar procedimientos médicos.

La escuela incinera a menudo el cadáver cuando termina de usarlo y devuelve los restos a sus familias, o los entierra en el cementerio médico de la universidad.

Lodge y su esposa, Denise, están acusados de recolectar, vender y enviar partes del cuerpo de estos cadáveres donados. Entre los compradores se encuentran Katrina Maclean, propietaria de una tienda llamada Kat’s Creepy Creations, que supuestamente compró caras diseccionadas por US$600 con intención de curtirlas en cuero, y Joshua Taylor, que hizo 39 pagos electrónicos a la señora Lodge por partes de cuerpo robadas en el transcurso de cuatro años.

El esquema podría haber estado funcionando desde 2018 hasta 2021. Los cuatro acusados se enfrentan a cargos por conspiración para cometer fraude electrónico y transporte interestatal de bienes robados. Si son declarados culpables, podrían enfrentarse a una pena máxima de 20 años de prisión.

La Universidad de Harvard dijo en un comunicado que estaba “profundamente perturbada” por las acusaciones y que había cooperado con las autoridades en la investigación. También dijo que había suspendido a Lodge y que había revisado sus políticas y procedimientos sobre el manejo de los cadáveres donados.

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