Un informe divulgado este jueves revela que al menos 2.056 menores fueron víctimas de abusos sexuales en la Iglesia católica en España, según una auditoría realizada por el despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo a solicitud de la institución religiosa.

Esta cifra contrasta significativamente con la estimación de la comisión independiente coordinada por el Defensor del Pueblo, que sugirió que el número de víctimas podría superar las 200,000.

La auditoría, que abarca denuncias desde 1905 hasta la actualidad, señala que el perfil mayoritario de las víctimas es masculino y que los abusos ocurrieron principalmente en colegios y seminarios, perpetrados por sacerdotes o profesores.

Aunque la Conferencia Episcopal aún no ha hecho pública la auditoría en su totalidad, el documento actualizado sobre las medidas tomadas por la Iglesia católica frente a los abusos a menores menciona un mínimo de 2,056 víctimas.

La Iglesia católica española ha encargado esta auditoría, la primera investigación sobre abusos sexuales realizada por la institución, en febrero de 2022, y se espera que se haga pública en una fecha posterior.

La comisión independiente coordinada por el Defensor del Pueblo había recopilado una encuesta que reveló que el 0,6% de la población adulta española afirmaba haber sufrido abusos sexuales por parte de religiosos católicos cuando eran menores, lo que equivaldría a más de 200,000 personas.

El informe de Cremades & Calvo Sotelo recomienda a la Conferencia Episcopal reconocer el daño producido, implementar medidas de prevención y proporcionar recursos de calidad para la reparación del daño a las víctimas.

A pesar de la arraigada tradición religiosa en España, este estudio marca la primera investigación significativa sobre pederastia en el clero en el país.

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