Aviones de guerra israelíes llevaron a cabo un bombardeo sobre el Aeropuerto Internacional de Saná, la capital de Yemen, afectando un avión de Yemenia Airlines y el edificio de aduanas. Este ataque se produjo apenas diez días después de que el aeropuerto reanudara sus vuelos civiles tras reparaciones por ataques anteriores.

La cadena Al Mayadeen informó que la agresión ocurrió tras la reapertura parcial del aeropuerto, que había comenzado a operar vuelos entre Saná y Amán, Jordania. Los ataques previos del 6 de mayo por parte de Israel ya habían causado serios daños a la infraestructura aérea del aeropuerto, interrumpiendo rutas humanitarias y económicas en una región ya devastada por la guerra.

Respuesta de Yemen

El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Yemen condenó los ataques, los cuales han forzado la suspensión de todos los vuelos de Yemenia Airlines, afectando gravemente a miles de civiles necesitados de viajar por razones médicas. Además, instaron a la comunidad internacional a condenar estos actos y buscar reparaciones para los daños causados.

En respuesta, las Fuerzas Armadas yemeníes realizaron dos ataques con misiles balísticos contra Israel como parte de sus esfuerzos para poner fin al bloqueo humanitario y la ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza.

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