Bacteria carnívora causa alerta en Japón ante aumento de casos
20/03/2024 - Hace 1 mes en InternacionalBacteria carnívora causa alerta en Japón ante aumento de casos
Tokio.- Una infección bacteriana aguda conocida por su progreso rápido y elevada tasa de letalidad, ha encendido las alarmas en Japón. Se trata del síndrome de choque tóxico estreptocócico, causado en su mayoría por la bacteria estreptococo del grupo A, la cual ha alcanzado cifras récord en el país asiático durante el año 2023, con un total de 941 casos, y en lo que va del año ya se han registrado 378 infecciones hasta el 25 de febrero.
Esta bacteria, también conocida como «enfermedad carnívora«, puede causar necrosis de los tejidos que recubren los músculos. Aunque puede infectar a personas de todas las edades, la media de afectados se sitúa en mayores de 30 años, según informes del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (NIID).
Los síntomas de esta infección pueden pasar desapercibidos en muchas ocasiones, pero en algunos casos se manifiestan con dolor de garganta e infecciones cutáneas. En raras ocasiones, la bacteria puede llegar al torrente sanguíneo, los músculos y los pulmones, lo cual puede llevar a complicaciones graves como hipotensión arterial, fallo multiorgánico e incluso la muerte, según autoridades japonesas citadas por The Japan Times.
Ante esta situación, el Ministerio de Sanidad de Japón ha instado a los gobiernos locales a tomar muestras de los pacientes diagnosticados con esta infección para determinar las cepas. Cabe destacar que cualquier infección por estreptococos del grupo A puede evolucionar a síndrome de choque tóxico.
Aumento de casos de bacteria carnívora preocupa a Japón
La entrada de la bacteria a través de una barrera comprometida, como una lesión cutánea, o a través de las membranas mucosas, puede dar lugar a la infección, según indican los Centros para la Prevención y el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC). Una vez en el organismo, las bacterias se propagan a los tejidos profundos y eventualmente llegan al torrente sanguíneo, teniendo la faringe, la vagina, la mucosa y la piel o los tejidos blandos como principales lugares de entrada.
A pesar de que todavía se desconoce la vía de contagio en un 50% de los casos, el tratamiento contra esta infección requiere hospitalización, suministro de antibióticos y en casos más severos, la eliminación de la fuente de infección mediante intervención quirúrgica. Los CDC estadounidenses estiman que la mortalidad asociada a esta infección oscila entre el 30% y el 70%.
