En una contundente demostración de fuerza, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció el despliegue de un masivo operativo militar y policial contra los remanentes de pandillas en varios barrios de la ciudad de Apopa. La ofensiva involucra a 2,000 soldados y 1,000 policías fuertemente armados con fusiles de asalto.

Cerco de seguridad en 5 colonias de Apopa

A través de su cuenta en la red social X (antigua Twitter), el mandatario salvadoreño informó que ‘luego de varias denuncias ciudadanas, acabamos de instalar un cerco de seguridad en las colonias Tikal 1, 2 y 3, Valle del Sol y La Chintuc, en Apopa’.

Imágenes compartidas por Bukele muestran a los efectivos militares y policiales, portando chalecos antibalas, adentrándose en estas colonias ubicadas en esa localidad a 13 kilómetros al norte de San Salvador, una zona históricamente asediada por las violentas pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18.

Nuevo embate contra las temidas maras

Los videos difundidos por el gobernante evidencian el establecimiento de retenes vehiculares y patrullajes a pie por parte de los uniformados, quienes despliegan un imponente operativo de control territorial y cerco sobre estos barrios de Apopa.

De acuerdo con la Policía Nacional Civil, el operativo ya ha dejado cuatro presuntos pandilleros del Barrio 18 detenidos en sus primeras horas.

Este despliegue masivo de fuerza se enmarca en la llamada ‘guerra contra las pandillas’ lanzada por Bukele en marzo de 2022, tras una oleada de violencia que dejó 87 asesinatos en un fin de semana. Desde entonces, el régimen de excepción decretado permite arrestos sin orden judicial.

Según cifras oficiales, en estos dos años de cruzada antipandillas se ha capturado a poco más de 80,000 supuestos miembros de estas temibles estructuras criminales. No obstante, organismos de derechos humanos denuncian abusos y detenciones arbitrarias de inocentes en esta polémica ofensiva.

Apoyo ciudadano a mano dura contra el crimen

A pesar de las críticas, la contundente política de ‘mano dura’ de Bukele contra las pandillas, consideradas una auténtica plaga en el país centroamericano, le ha granjeado altos niveles de respaldo popular.

De hecho, el éxito en la reducción de los índices delictivos fue un factor clave para la reciente reelección del polémico mandatario en febrero pasado, cuando obtuvo un nuevo mandato de cinco años.

Con esta nueva y espectacular movilización de efectivos en Apopa, Bukele reitera su determinación de no cejar en su cruzada contra las pandillas, aunque ello implique desplegar todo el musculo militar y policial del Estado para recuperar e intensificar el control territorial en las zonas tradicionalmente dominadas por estos violentos grupos delincuenciales.

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