Chile está sumergido en la etapa crucial de la propuesta de una nueva Carta Fundamental. Tras la firma del decreto supremo por parte del presidente de izquierda, Gabriel Boric, que convoca a un plebiscito constitucional el 17 de diciembre, el Servicio Electoral ha dado inicio oficialmente a la campaña. Las opciones electorales de cada partido político han sido inscritas, marcando el comienzo de una carrera contrarreloj que durará cinco semanas hasta la votación.

Los equipos a favor y en contra, liderados por la derecha y la izquierda oficialista respectivamente, trabajan arduamente para movilizar a los votantes indecisos. Según los sondeos, estos indecisos representan entre un 15% y un 30% de los votantes y jugarán un papel determinante en los resultados del plebiscito. Expertos en medios, estrategas digitales, publicistas y políticos se han unido para persuadir a aquellos que aún no han tomado una decisión.

Diferencias con el plebiscito constitucional de 2022

A diferencia del proceso constitucional fallido de 2022, en esta ocasión solo los partidos políticos podrán participar en la campaña y recaudar fondos. Las organizaciones de la sociedad civil, que desempeñaron un papel protagónico en el triunfo del rechazo a la anterior propuesta constitucional, no tendrán esta atribución.

Además, se estableció que las distintas fuerzas políticas recibirán financiamiento público similar al anticipo proporcionado antes de una elección de diputados, sin contar con financiamiento posterior por voto.

Los partidos políticos a favor del nuevo texto constitucional incluyen a la coalición Chile Vamos de la derecha tradicional y al Partido Republicano de ultraderecha. En contra se encuentran los partidos gubernamentales y la democracia cristiana.

Será el 17 de noviembre cuando los partidos revelen los mensajes destinados a persuadir a sus electores a través de la franja electoral, transmitida en todos los canales de televisión.

Esta campaña juega un papel decisivo, considerando que hay una considerable cantidad de votantes indecisos, y aunque las encuestas proyectan un cómodo rechazo al nuevo documento, todo está en juego. Este constituirá el segundo plebiscito constitucional al que se enfrentan los chilenos, después del rechazo del electorado al proyecto de izquierda en septiembre de 2022.

También te puede interesar: 

• Gabriel Boric recibe nueva propuesta de Constitución de Chile y llama a plebiscito.