En un reciente encuentro en la Casa Blanca con el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, enfatizó que para Ucrania será complicado recuperar Crimea, la península que fue entregada a Rusia sin disparar un solo tiro.

Esta declaración la hizo al recordar que Crimea fue cedida durante el mandato del ex presidente Barack Obama, argumentando que no tiene relación directa con su administración.

Contexto de la entrega de Crimea

Trump explicó que la entrega de Crimea se realizó sin conflicto armado, y ahora cuestionan si es posible recuperarla, lo cual considera muy difícil. Además, señaló que tiene esperanzas en que Rusia, Ucrania y Bélgica acepten un acuerdo de paz, aunque mencionó que no cree que Moscú esté impidiendo un alto el fuego.

Posición de Ucrania y sus implicaciones

El presidente Trump destacó que el mandatario ucraniano, Vlodimir Zelenski, mantiene una postura intransigente al no reconocer la ocupación de Crimea, lo que obstaculiza las negociaciones de paz. Esta rigidez fue evidenciada cuando Zelenski declaró a un medio que Ucrania no reconoce legalmente la ocupación de Crimea.

Impacto en las negociaciones

Las conversaciones para resolver el conflicto ruso-ucraniano, previstas para realizarse en Londres, se aplazaron debido a la negativa de Zelenski a reconocer Crimea como territorio ruso.

En respuesta, el secretario general estadounidense, Marco Rubio, y el enviado especial Steve Witkoff, cancelaron su participación, lo que también llevó a que representantes de Reino Unido, Francia y Alemania suspendieran su asistencia.

Trump reafirmó que Estados Unidos no se retirará de las negociaciones sobre Ucrania, pero dejó abierta la posibilidad de un cambio de actitud en un futuro cercano.

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