Cuatro relatores de las Naciones Unidas expresaron su preocupación ante la inminente ejecución en Estados Unidos de Kenneth Smith mediante la inhalación de nitrógeno, un método que sería una primicia a nivel mundial.

Los expertos manifestaron su temor de que este procedimiento cause «grave sufrimiento», ya que la muerte se produce por hipoxia o falta de oxígeno.

Destacaron en un comunicado que no existen pruebas científicas que respalden la ejecución por este método y expresaron su preocupación de que pueda violar la prohibición de la tortura y otras penas crueles, inhumanas o degradantes.

Kenneth Smith, cuya ejecución está programada para el 25 de enero en el estado de Alabama, ha generado controversia debido al cambio propuesto en el método de ejecución.

Inicialmente condenado a muerte en 1988 por un asesinato por encargo, su caso ha sido objeto de polémica y apelaciones a lo largo de los años.

Los relatores de la ONU instaron a las autoridades a suspender la ejecución y revisar el protocolo, resaltando la falta de respaldo científico y el posible impacto inhumano del uso de la inhalación de nitrógeno como método de ejecución.

La solicitud de suspensión de la ejecución de Kenneth Smith fue presentada al Tribunal Supremo de Estados Unidos por sus abogados, quienes argumentaron que el método propuesto podría conducir a una muerte dolorosa y humillante.

Sin embargo, el alto tribunal rechazó el recurso, lo que intensifica la preocupación de los relatores de la ONU y agrega una dimensión adicional a la discusión sobre la ética y la humanidad en los métodos de aplicación de la pena de muerte en el país.

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