Wisconsin, Estados Unidos.- Un farmacéutico de Wisconsin que fue arrestado por destruir más de 500 dosis de la vacuna COVID-19 es un «devoto de las teorías de conspiración» que pensó que las inyecciones mutarían el ADN humano, alegan la policía y los fiscales.

Steven Brandenburg, de 46 años, farmacéutico de Advocate Aurora Health, también creía que el mundo se estaba «derrumbando» y había estado acumulando alimentos, según las autoridades en documentos judiciales publicados este lunes.

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Los fiscales alegan que, a propósito, echó a perder 57 viales de la vacuna Moderna durante la Navidad, lo suficiente para inocular al menos a 500 personas.

«Se había formado la creencia de que no eran seguros», dijo el fiscal de distrito del condado de Ozaukee, Adam Gerol, en una audiencia virtual.

Un detective del caso describió al farmacéutico como un «devoto de las teorías de conspiración» que creía que la vacuna podría dañar a las personas, según los registros judiciales.

Brandenburg, que tiene dos hijos pequeños, estaba en medio de un divorcio y se había presentado en la casa de su esposa separada el 30 de diciembre con dos suministros de alimentos para 30 días, diciéndole que ella negaba el hecho de que el mundo se estaba «derrumbando», según una declaración jurada de la corte.

Su esposa también dijo en la declaración jurada que Brandeburgo estaba acumulando comida a granel y armas de fuego en unidades de alquiler. También había llevado un arma al trabajo dos veces, agregó Gerol.

Brandenburg fue arrestado la semana pasada y se ordenó retenerlo con una fianza de diez mil.

Los fiscales dijeron que necesitan determinar el alcance del daño a las vacunas expuestas antes de presentar cargos penales en el caso.