Gisel Vacapudo haber sido una nueva víctima de la inseguridad en Argentina, pero se salvó de milagro. El sábado a la noche fue atacada a sangre fría por delincuentes en la puerta de su casa y recibió un balazo en la cabeza.

La mujer primero fue trasladada al Hospital Florencia Díaz y luego derivada al Hospital de Urgencias. Estable y desde una sala común del centro de salud.

«Fui a cerrar la puerta de mi casa y apareció un chico joven armado que se metió, estaba muy nervioso, me empezó a pedir plata, me apuntó en la frente y me disparó«, explicó Gisel. Y agregó sobre ese momento: «Vi todo negro y empecé a escuchar ruidos».

Según precisó, luego del tiro apareció otro ladrón en su vivienda, que también le apuntó mientras ella estaba tirada en el piso. «Cerré los ojos y me hice la muerta para que no me maten, y a los segundos se fueron», dijo la víctima.

La mujer sobrevivió de milagro y espera el alta de los médicos para volver a su casa, donde vive con sus cuatro hijos (17, 14, 8 años y dos semanas). Todavía no le retiraron la bala de la cabeza, pero sí «los perdigones y plomo».

Sin embargo, reconoció que «tiene miedo» de regresar a su barrio en este contexto de inseguridad. «No sé por qué me dispararon porque nunca me resistí, fue todo demasiado rápido. Después me enteré que se llevaron celulares y un tele. Me quedé tranquila porque me enteré que mis hijos estaban bien«, cerró Gisel sobre el episodio.

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