El gobierno federal entregó el emblemático Hangar Presidencial, que se ubica en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). El objetivo es que la Sedena utilice este espacio para actividades militares. Esta noticia causó revuelo en la opinión pública, ya que marcó un cambio significativo en la administración de este importante recurso.

Según un decreto emitido por el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin) y publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el martes pasado, el gobierno ha cedido el uso del hangar a la Sedena. Esto le permite hacer uso de un terreno de 127,405.03 metros cuadrados y sus instalaciones, que suman un total de 20,164.39 metros cuadrados. Sin embargo, es importante destacar que este traspaso de poder no implica la propiedad del mismo.

En caso de que se requieran obras de construcción, reconstrucción, modificación, adaptación, conservación, mantenimiento, reparación o demolición, la Sedena deberá solicitar la autorización correspondiente a las autoridades gubernamentales. Esto demuestra que, aunque el Ejército ahora tiene el poder de utilizar estas instalaciones, sigue existiendo un control y supervisión necesarios para garantizar el correcto uso de los recursos.

Además, se establece que la Secretaría de la Defensa Nacional será responsable de la custodia y vigilancia del hangar, asumiendo los gastos necesarios para su correcta conservación y mantenimiento.

Características e historia del Hangar Presidencial

El Hangar Presidencial tiene una impresionante superficie de terreno y construcción: 127,405.03 metros cuadrados y 20,164.39 metros cuadrados, respectivamente. La Presidencia de la República lo poseía anteriormente y el extinto Estado Mayor Presidencial lo administraba hasta 2018. Al entregarlo a la Sedena, el gobierno busca maximizar el potencial del hangar y garantizar su uso eficiente para actividades militares.

El decreto que concede el uso de las instalaciones a la Secretaría de la Defensa Nacional entrará en vigor el próximo miércoles 27 de diciembre. Esto marca un hito en la historia del hangar y abre nuevas oportunidades para el desarrollo de la Sedena en su misión de salvaguardar la seguridad y soberanía del país.

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