El Gobierno de Argentina ha anunciado su decisión de vender autos y aviones oficiales como parte de su objetivo de «terminar con los privilegios de la política» y reducir los gastos de funcionamiento. La medida busca poner fin a los excesos y mostrar austeridad en tiempos de crisis económica y social.

Según el vocero presidencial, Manuel Adorni, el ajuste que se busca implementar en la política alcanzaría los 3 mil millones de dólares anuales en gastos de funcionamiento. En ese sentido, el número de choferes para los funcionarios también se reducirá en un 50%, además de disminuir la cantidad de funcionarios.

En relación al tema de los vehículos oficiales, Adorni señaló que se llevará a cabo una reducción de la flota. Una parte de los autos en buenas condiciones se destinará a las fuerzas de seguridad, mientras que la otra parte se pondrá a la venta. Esta medida busca optimizar el uso de los recursos y evitar que los vehículos sean utilizados con exclusividad por la política.

Pero las medidas no se detienen ahí. El Gobierno también reveló el abultado monto que se pagaba para mantener el seguro de unos cuadros dispuestos en la Quinta de Olivos, residencia oficial del presidente.

Adorni destacó la importancia de mostrar austeridad en un país con problemas económicos y sociales. Señaló que resulta «absolutamente irracional» gastar millones de dólares en seguros de pinturas mientras hay millones de argentinos en situación de pobreza.

Por otro lado, en cuanto a las paritarias (negociaciones salariales), el vocero confirmó que se permitirá la libertad de discusión entre las partes involucradas y que el Gobierno no intervendrá en dichas negociaciones.

En resumen, el Gobierno de Argentina ha decidido tomar medidas de austeridad y reducción de gastos. Incluyendo la venta de autos y aviones oficiales, en un intento por mostrar transparencia y acabar con los privilegios de la política.

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